Absuelto en el juzgado, condenado en la federación
Manu Preciado está castigado cautelarmente a 10 partido de sanción
Santander
Absuelto. Esta vez la justicia ha sido realmente rápida. Incidentes el sábado, vista judicial en l martes y sentencia el jueves. Jaime Parra, juez titular del Juzgado de instrucción nº1 de Santander, ha resuelto en cinco días la denuncia por amenazas presentada por el árbitro Borja Mata Sangiao contra Manu Preciado, entrenador del Ribamontan al Mar a raíz de los incidentes que sucedieron en el partido Revilla-Riba y que culminaron con la suspensión del choque.
Para el juez, que "no es que ponga en duda la palabra de los árbitros, cuya labor es siempre difícil y constantemente reprochada, sino que en vía penal no puede tenerse por acreditados aquellos hechos sobre los que no ha recaído una prueba plena", la clave de su decisión estriba en que se ha encontrado con dos versiones contradictorias, la del árbitro, refrendada por uno de sus jueces de línea, y la del técnico, con el respaldo del delegado del Ribamontán al Mar, por lo que se decide por aplicar lo que define en su sentencia como "principios básicos como la presunción de inocencia o in debeo pro reo".
Esta sentencia no librará a Preciado del castigo por vía deportiva ya que el propio juez dice que "no cabe duda de que, desde el punto de vista federativo, los hechos se pueden declarar acreditados y, previsiblemente, se impondrá la sanción que se estime procedente. De momento, el Comité de competición le ha impuesto, con carácter cautelar, una sanción de un máximo de 10 partidos, que ahora deberá refrendarse. De momento, el técnico no podrá dirigir al Riba en el partido en el que su equipo recibirá al Torina y el próximo martes el Comité decidirá la sanción definitiva.