El GOB desconfía de la promesa del Gobierno de que cerrará Es Murterar

PALMA

Los ecologistas han acogido con reservas el compromiso hecho público por el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, de que adoptará medidas que permitan acelerar el cierre de la central de carbón de Es Murterar en Alcúdia. Nadal trasladó esta intención el jueves a la presidenta del Govern, Francina Armengol, pero eludió poner plazos a este proceso. Desde el GOB, que ha protagonizado una campaña continua para pedir la clausura de la planta, ponen en cuestión que el Gobierno tenga una intención real de llevarla a cabo y piden que concrete ya un calendario.

"Nos gustaría interpretarlo positivamente pero no nos fiamos mucho porque hasta ahora, ante las intenciones del Govern de plantear un calendario, se ha encontrado con la negativa rotunda del Ministerio", dice la portavoz del GOB, Margalida Ramis, para quien la reunión de esta semana entre el ministro y la presidenta del Govern ha sido "mas protocolaria que otra cosa", porque no se ha concretado cuándo y cómo piensa llevar a cabo el cierre.

Ramis advierte de que el Ministerio no puede seguir negándose a cerrar Es Murterar cuando tiene adquiridos compromisos en Europa con el cambio climático, y añade que es necesario "programar ya la transición energética".

El GOB alerta de que la energía renovable en Balears es prácticamente inexistente. Lo atribuyen a que el territorio es limitado y los parques que salen rentables son los de grandes dimensiones, que son los que chocan con las normas de protección. La solución pasa por que la inversión sea rentable, y para ello, sostienen los ecologistas, la administración debe implicarse en la obtención de alternativas de inversión a los megaparques.

Dice Margalida Ramis que el Estado tendría que asumir su compromiso con un territorio insular como el de Balears y denuncia que en lugar de eso "pone impedimentos" para la instalación de fuentes alternativas.

Incremento de las renovables

El ministro Nadal afirmó que el cierre de Es Murterar estará supeditado al incremento de las energías renovables en las Islas y al refuerzo de las conexiones eléctricas con la Península. Balears está a la cola del Estado en uso de estas fuentes. Representa solo el 2,5% de la producción.

El Plan de Transición Energética del Govern apuesta por aumentar el uso de las renovables, la producción con gas natural y el cierre progresivo de los centros de producción energética más contaminantes. El objetivo es conseguir que un 10% de la electricidad se obtenga por estas fuentes limpias.

La aplicación de este plan implica el cierre de los grupos más contaminantes de la central térmica de Es Murterar y la sustitución del combustible en la central de Maó por gas natural.

La planta de Alcúdia es responsable del 25% de las emisiones de CO2 en las Islas; este porcentaje es del 56% de las emisiones totales en Menorca, en el caso de la central de Maó.

La intención del Govern es que la primera fase del desmantelamiento de estas instalaciones se haga efectiva antes de 2020.

España firmó en mayo una declaración política de la Comisión Europea por la que se compromete a acelerar en los territorios insulares la transición a un modelo energético basado en el uso de las renovables. Entre los argumentos de este documento figura el de la estacionalidad de la demanda en regiones como la nuestra, muy dependientes de la actividad turística.