El detenido por el crimen de Susqueda incriminó a su hijo
El acusado del doble crimen del pantano de Susqueda, Jordi Magentí, explicó a su compañero de celda que fue su hijo quien mató a tiros a los dos jóvenes y que él le ayudó a deshacerse de los cadáveres
Girona
Jordi Magentí explicó a su compañero de celda, un preso de confianza, que su hijo mató a tiros a los dos jóvenes del Maresme que los había sorprendido en medio de la plantación de marihuana que padre e hijo tenían en Susqueda.
También le dijo que para ayudar al hijo, él se deshizo de los dos cadáveres y del coche de la pareja, tirándolos al pantano. Magentí dijo a su compañero que había colaborado porque tenía una deuda con su hijo ya que años antes mató a su madre, también a tiros.
Después de esta confesión al compañero de prisión los Mossos tomaron declaración a Magentí, que mantuvo la versión pero cayó en contradicciones e incluso dio detalles que sólo podía saber el asesino. La policía no le creyó. Es más, los investigadores están convencidos de que actuó solo y han recogido indicios que apuntan directamente a Magentí como el único autor de los dos crímenes.
Aparte de todos los indicios, los investigadores saben que al día siguiente volvió a Susqueda con su mujer (porque ella se lo explicó), que la mujer no había estado nunca en el pantano hasta entonces -por eso creen que la quería utilizar de coartada- y que mientras estaban allí, Magentí desapareció un par de horas. En este tiempo, cree la policía que Magentí hizo desaparecer el coche de la pareja.
El abogado de las familias de las víctimas, Carles Monguilod, explicó que no hay ninguna prueba directa que incrimine Jordi Magentí, pero que existen suficientes indicios para considerarlo autor material del doble crimen.
No han encontrado el arma con la que se dispararon los disparos que mataron a los dos jóvenes del Maresme, pero sí han localizado munición en casa de Magentí que podría ser compatible con la que provocó la muerte de Marc Hernández y Paula Mas, según detalla el juez instructor de Santa Coloma de Farners en el auto de prisión de Magentí, aunque no se ha podido precisar el calibre de la munición que los mató. También le encontraron armas blancas y el cuerpo del chico tenía heridas de arma blanca.
Casando informaciones de las cámaras de la zona, testimonios de vecinos, fotografías de excursionistas que estaban en la zona en ese momento, estudios geológicos y del sonido, sitúan el coche del acusado en la zona conocida como la Rierica el 24 de agosto de 2018 entre las 11 y 21 minutos y las 11 y 26 minutos de la mañana, que es la hora y el lugar en la que los investigadores calculan que se produjeron los 4 disparos que acabaron con la vida de los dos jóvenes del Maresme .