El camino de Santiago atenúa el descenso demográfico del rural gallego

Un grupo de peregrinos en ruta / .

Santiago de Compostela
El camino de Santiago tiene repercusiones directas sobre la economía, el empleo, la afiliación a la seguridad social, la demografía o la conservación del patrimonio. Es lo que se desprende de los primeros resultados del Estudio del impacto socioeconómico del Camino de Santiago elaborado por la USC a partir de encuestas realizadas en dos municipios, Melide y Pedrafita do Cebreiro.
Según este estudio, no es que suba la población de los municipios por los que pasa la ruta, a excepción del de Sarria, sino que comparado con concellos similares del rural gallego, se ha frenado la caída en aquellos por los que pasa el camino. El impacto cultural es positivo, el camino de Santiago sirve para mantener el patrimonio artístico. Desde el punto de vista social es neutral, no tiene impactos negativos, aunque los vecinos del camino están seguros de que sus servicios sanitarios o de transporte sufrirían recortes de no ser por los peregrinos.
Ese análisis revela que los peregrinos concentran el 2,3% del gasto turístico en la comunidad, pero, a la vez, cada uno de ellos supone el mismo impacto económico que 2,3 turistas, porque su peso es mayor en la economía de aquellos concellos rurales por los que pasan.
Cada euro de gasto de un peregrino, se calculan 50 al día, tiene su reflejo en el PIB local, con un máximo del 25% en Triacastela, y genera un 18% más de empleo. Además un 80% de los peregrinos volverán como turistas en el futuro.
El cálculo estadístico lo certifican las menores tasas de paro en esas localidades y la afiliación a la Seguridad Social.




