Aceptar y olvidar

Hace un par de semanas comencé la temporada con un torneo en Portugal. Meses atrás, mi equipo técnico y yo decidimos alargar la pretemporada buscando una subida de nivel en mi juego, que hemos conseguido, y que ahora toca llevar a la competición.

En este primer torneo en Portugal, durante un partido contra el n. 103 del mundo, en un punto clave, el rival me dejó una bola a media pista, fácil, me invertí de derecha, mi mejor golpe, y la tire fuera, por dos dedos. Que hice? Aceptar y olvidar. Y siguiente punto. Si en lo que restaba de partido me pongo a pensar en ese punto fácil que había fallado y que me hubiera dado un juego importantísimo, pierdo el partido. De nada me servía pensar en él.

Esto se puede extrapolar a la vida. Hay que aceptar las cosas tal como nos vienen y no como nos hubiera gustado que vinieran, y siempre mirar hacia delante, nunca hacía atrás pensando en lo que podía haber sido y no fue. Creo que esta es la actitud correcta cuando viene una situación difícil, de cualquier índole. Yo, por mi parte, intentaré seguir poniéndola en práctica la semana que viene en un torneo que juego en Lituania.