Un servicio para visibilizar los delitos de odio: una treintena de consultas de víctimas
Los incidentes por racismo y los relacionados con la orientación y la identidad sexual son los más comunes
Málaga
La bolsa oculta de delitos de odio es enorme. Los expertos calculan que alrededor del 90% de los casos no se denuncian, bien por desconocimiento de las víctimas o por miedo a una exposición pública, ya que puede afectar a circunstancias íntimas como la orientación o la identidad sexual de una persona. Con el objetivo de intentar atajar ese déficit, el Colegio de Abogados de Málaga puso en marcha en junio de 2015 un servicio de atención jurídica gratuita on line para ofrecer asesoramiento. En 2017 se recibieron una treintena de consultas, una cifra que representa un avance respecto al año anterior, pero que aún está alejada de la realidad.
Esta iniciativa, puesta en marcha en coordinación con la fiscalía y la Policía Nacional, fue pionera en todo el país y en Andalucía se han ido creando turnos de oficio similares en las instituciones colegiales de Córdoba y Sevilla. "Estimamos que solo se presentan un 10% de denuncias. Este tipo de delitos afecta muchas veces a circunstancias personales e íntimas, y en muchos casos no se quiere exteriorizar ni hacer público", recalca el decano del Colegio de Abogados de Málaga, Francisco Javier Lara.
Los abogados malagueños asesoran virtualmente y de forma gratuita a posibles víctimas de discriminación por motivos de raza, etnia, religión, orientación sexual, diferencia ideológica o discapacidad. Se informa a quien pide ayuda de cuáles son sus derechos y cómo pueden denunciar. Si no disponen de medios, el caso se deriva al turno de oficio. Las víctimas, a veces, no saben ni que lo son. "En esas consultas que nos hacen, muchas de ellas han sido para conocer si son o no víctimas de delitos de odio. 'Me está ocurriendo tal cosa...', porque lo que quieren es información para saberlo", añade Lara.
Según el último informe sobre Delitos de Odio del Ministerio del Interior, Andalucía es la tercera comunidad española con más denuncias, 152 en 2016, tras Cataluña y Madrid. Los incidentes por racismo y los relacionados con la orientación y la identidad sexual son los más comunes. Las víctimas suelen ser personas de colectivos muy vulnerables y una de las complicaciones en la investigación de este tipo de casos es que no solo hay que demostrar el hecho, sino su motivación. Los casos van afloraron poco a poco, pero la mayoría aún es invisible.