Punto y seguido con victoria en La Salobreja
El Jaén Paraíso Interior FS vence a Gran Canaria FS por 6-0 en su último partido como local de la liga regular

Víctor Montes trata de frenar el avance de un jugador del Gran Canaria FS. / Pedro Jesús Chaves

Jaén
El Jaén Paraíso Interior cumplió este sábado con el trámite y ganó con claridad 6-0 al Gran Canaria FS, colista de la Liga Nacional de Fútbol Sala y un conjunto que ya está descendido. Lo hizo con seguridad, con muchas rotaciones y en el último partido de la liga regular en La Salobreja, en la penúltima jornada del campeonato. Ahora, aunque depende de sí mismo, el equipo de Dani Rodríguez se jugará el cuarto puesto en la última jornada el próximo fin de semana en la difícil cancha de Aspil Vidal Ribera Navarra, un conjunto que es octavo pero que debido a la distancia con su perseguidor, Cartagena, de tan solo un punto, no tiene segura su participación en los play off por el título. A Jaén le persigue Osasuna Magna, que tiene los mismos puntos que los amarillos, 61, y que juega en casa frente a O Parrulo Ferrol. Por todo, se antoja vital la victoria de los jiennenses para terminar cuartos.
En cuanto al partido disputado este sábado en La Salobreja, los de Dani Rodríguez fueron en todo momento superiores a los isleños, que a pesar de lo claro del resultado tuvieron alguna clara para haber estrenado el marcador. Imanol, que ocupó la portería en los jiennenses, realizó un buen partido y sus paradas fueron clave en muchos momentos del encuentro para evitar que el nerviosismo apareciera en algún momento por el vetusto pabellón de la capital.
Carlitos, con una volea al alcance solo de muy pocos, adelantó a los jiennenses en los primeros minutos del encuentro. Después, Dani Martín, que hizo cuatro tantos, fue el protagonista del encuentro ofreciendo al público de La Salobreja un ramillete de detalles, calidad y acierto solo apto de jugadores con su clase. El público volvió de nuevo a volcarse con el salmantino que cada vez que juega sabe ganarse con trabajo y acierto el cariño de los suyos. El otro tanto del partido, el tercero, lo hacía Campoy nada más iniciarse el segundo tiempo.




