Gran Canaria y Tenerife piden una regulación de la vivienda vacacional ya
Tras la manifestación de un grupo de vecinos de los barrios de la Isleta y Guanarteme de Las Palmas de Gran Canaria en contra de la turistización, los cabildos de Gran Canaria y Tenerife esperan que la vivienda vacacional se regule cuanto antes para acabar con los pisos ilegales y aprovechar las ventajas de esta modalidad.
Las Palmas de Gran Canaria
Tras la primera manifestación ciudadana en Canarias en contra de la turistización, la especulación y desorbitada subida de los precios de los alquileres de viviendas que se están produciendo en núcleos urbanos a la sombra del alquiler vacacional, los cabildos de Gran Canaria y Tenerife piden al Gobierno canario una regulación de la vivienda vacacional cuanto antes.
Según la consejera de Turismo del Cabildo de Gran Canaria, en la isla hay registradas 2.000 viviendas vacacionales, lo que constituyen unas 10.000 camas, cantidad que para Inés Jiménez no es un problema por ahora.
Para Jiménez, "el problema son las viviendas ilegales y que el Gobierno canario no nos ha adelantado nada, así que no sabemos qué competencias vamos a tener una vez que apruebe el reglamento".
En este sentido, la consejera considera que "los ayuntamientos deben tener las competencias y el Gobierno debe resolver esta situación antes de que esto se convierta en un problema mayor".
Por su parte, el consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife se muestra a favor de la vivienda vacacional, pero no descarta aplicar medidas restrictivas en las zonas turísticas, que en Tenerife representan el 3 por ciento de toda la isla.
Alberto Bernabé considera que "debemos tener la habilidad para aprovechar más las ventajas que los inconvenientes de esta modalidad y regularlo en cantidad y calidad".
La desorbitada subida de precios de los alquileres en varios puntos del Archipiélago está generando una crisis de vivienda. De hecho, el acceso a una vivienda habitual fue el motivo que sacó a la calle este sábado a un grupo de vecinos de los barrios de La Isleta y Guanarteme en Las Palmas de Gran Canaria que recorrieron en pijama el paseo de la playa de Las Canteras.