Paladas de éxito y medallas

Vigo

El piragüismo es uno de los deportes que más alegrías le dan al deporte español. Los Juegos Olímpicos son, versionando a Lineker, una competición en la que compiten todos contra todos y siempre gana algún gallego. Pues esto, afortunadamente, sigue siendo así. Antes del Europeo, se celebraba en Szeged (Hungría) la Copa del Mundo en donde iban a realizar un importante test los palistas gallegos y españoles. Y el balance fue productivo y positivo además en casa de un país que es una potencia en este deporte. La Selección Española consiguió 8 medallas de las cuales siete tienen acento gallego.

El K-4 integrado por Cristian Toro y el cangués Rodrigo Germade consiguió la medalla de oro en K-4 500 metros con un tiempo de 1:18.002 milésimas, venciendo a las dos tripulaciones húngaras que se llevaron plata y bronce. Germade hizo doblete porque con Marcus Cooper conseguía también el oro en K-2 500 metros. La otra medalla del domingo la consiguió el vigués Roi Rodríguez con un oro en K-1 500 metros venciendo al potente luso Fernando Pimienta, en 1:35.149 milésimas. Era su segundo metal porque ya había ganado el bronce en K-1 100 metros. En K-1 200 metros el betanceiro Carlos Arévalo conseguía la plata con un tiempo de 34.044 milésimas, solamente superado por el ruso Lukantsov. El breoganista Diego Romero acabó la prueba de C1 5000 metros en tercera posición. La otra medalla con acento gallego fue el oro de Cristian Toro acompañado de Saúl Craviotto en el K-2 200.