Los agentes inmobiliarios recomiendan compartir o alquilar en el centro de la isla

Palma de Mallorca

La ley nace con la vocación de ayudar a solucionar uno de los problemas sociales más graves, el acceso a la vivienda. En Baleares la demanda supera a la oferta, el buzoneo de las inmobiliarias en busca de pisos en venta es masivo en determinados barrios y encontrar pisos por menos de mil euros al mes en Palma es una quimera. Los agentes inmobiliarios celebran que la nueva normativa vaya a crear un registro de agentes para que el consumidor cuente con garantías en las transacciones, aunque censuran el articulado referido a la obligación de los grandes tenedores de poner los pisos vacíos a disposición de la administración.

Según datos de 2015, Palma contaba con 16.000 pisos vacíos, una cifra que ha descendido en los últimos dos años y medio según el presidente de los agentes de la propiedad inmobiliaria José Mir. Reconoce que en Palma los inmuebles de alquiler a precios razonables brillan por su ausencia. Considera que las únicas soluciones pasan por compartir piso y vivir en el centro de la isla, lejos de las zonas turísticas.

En cualquier caso, Mir espera que con la nueva ley se regule la actividad inmobiliaria ya que se prevé la creación de un registro con la inscripción de los agentes que se dedican a esta actividad. Esto permitirá al consumidor tener una serie de garantías ya que actualmente cualquier puede ejercer como agente inmobiliario y no se exija ningún tipo de requisito o licencia. Cataluña, Euskadi y Andalucía ya lo regulan mientras que en Balears se calcula que hay entre 1.000 y 1500 inmobiliarias.