CurioSERando: "De tigres y Dulcineas"
Los escarabajos tigres ya se asoman a las lagunas. Es ahora un buen momento para observarlos (evitando las horas centrales del día y pertrechados de protección solar y agua)
CurioSERando: De tigres y Dulcineas
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Alcázar de San Juan
Es esta época el mejor momento, el máximo observable, para divisar estos insectos. Por máximo observable nos referimos a que concurren el mayor número de especies distintas en un lapso de tiempo. Más de media docena entre Lillo y Alcázar alrededor de las lagunas salinas. Se han de dar una serie de condiciones pero una de ellas serían las temperaturas altas. Puede que la humedad tenga algo que ver. Como efectos negativos, sin duda el uso de vehículos recreativos tipo quads y motocicletas en los vasos lagunares y los pesticidas sistémicos.
¿Por qué estos insectos son interesantes en La Mancha?
De la misma forma que las pequeñas elevaciones en el terreno han servido durante estos últimos siglos para levantar molinos de viento, los escarabajos tigres o cicindelas llevan en las lagunas posiblemente desde que se formaron, ya sean las especies actuales o algunas ancestrales cuya descendencia la podemos ver en forma de especies autóctonas. Lo extremo de su hábitat con temperaturas óptimas para ellos que superan los 39º, la supervivencia llevada al límite -tienen multitud de depredadores y los encuentros con otras especies similares e incluso entre individuos del mismo sexo terminan, siempre, en muerte- o lo corta e intensa que es su vida como adultos -no van más allá de los 20 días-, nos proporcionan un menú que nos obliga a ir a visitar los complejos lagunares manchegos durante estos días.
Las litoralis, las campeonas
Una de las especies, Cicindela littoralis, es la campeona del humedal manchego. Grandes, abundantes, con vuelos característicos de varios metros, acechan los bordes más inmediatos de las lagunas en grandes patrullas. Son las que más y mejor viven en ambientes abiertos, desplazando a otras especies parecidas. Comen hormigas y pequeñas moscas (o cualquier cosa que se les acerque), y en Villafranca de los Caballeros se da una extraña circunstancia. Las características del suelo, la presión humana en una zona utilizada para el baño y puede que otras circunstancias, están haciendo posible que veamos dos subtipos de “litoralis”: una rojiza y pequeña, típica de la Península, y otra más oscura y mucho más grande, cuyo análisis genético puede que nos dé alguna que otra sorpresa. Son sin duda las más difíciles de atrapar para su observación y especialmente fieras e inteligentes. En el pasado congreso de entomología contaban que además tenían una inteligencia fuera de lo común en los insectos: aprenden de los movimientos de sus posibles depredadores y su cría en cautividad ha demostrado algo sorprendente en insectos: saben que van a ser alimentadas si se sigue una pauta, cosa que no ocurre con ninguna otra especie de cicindela existente en España.
Especies chinas y africanas
El cambio climático entendido como una desertización del suelo por sobreexplotación agrícola, la contaminación de aguas superficiales y subterráneas o cambios drásticos en el hábitat de estos insectos, están dejando ver en estos años, la presencia de una cicindela típica del norte de África: la Cephalota maura. De un color negro azabache en muchas ocasiones, parece competir mal con el resto de especies similares, pero se adapta a hábitats donde el resto no pueden: balsas ganaderas, taludes, caminos muy transitados y contaminados… Vuelan poco y mal, pero a mucha altura. Hace un par de años se dejaban ver por La Veguilla, el arroyo de San Cristóbal, el canal de la depuradora de Quero e incluso las balsas de agua contaminada cercana a la laguna de Sánchez Gómez en Mota del Cuervo. Tal vez sean también una oportunidad para recuperar determinados ambientes.
De especies típicas en China, Mongolia y que han venido por corredores caucásicos detectamos la Myriochila melancholica. Rara, pequeña, pero observable también estos días. Una verdadera incógnita su presencia en las lagunas.
Imperiales y dulcineas
Dos especies recogidas en el catálogo de las llamadas de Interés Especial. La dulcinea, especie emblemática de las lagunas manchegas, ya han emergido. Las Yeguas es un buen sitio para observarlas, mientras que la laguna de Los Carros es un caso único en el mundo: sólo está esta especie, y se ven por cientos (una especie de santuario a nivel mundial). Hasta hace poco más de diez años era confundida con una especie propia de Cádiz, Huelva y el Algarve, lo que nos da una idea de la necesidad de ahondar en nuestras especies autóctonas. Junto a la dulcinea, la imperialis. Muy parecida, pero que hace honor a su nombre: vuelo esbelto, potente y muy territoriales, es magnífico observar cómo se distribuyen ambas especies en un mismo espacio. La imperialis se queda en la zona de hormigueros que jalonan el interior de las lagunas salinas desecadas, mientras que las dulcineas son apartadas hasta los caminos. Localizar las zonas de contacto de ambas especies nos puede dejar ver una feroz lucha por la conquista del territorio. Todo esto es observable, durante estos días y hasta finales de julio, en las lagunas alcazareñas y de la comarca.