El Grupo Vivir pilotará la nave rojiblanca

La sala de Conferencias de la Ciudad Deportiva de la capital acogía la Asamblea Extraordinaria del Zamora CF en la que los socios de número deberían someter a aprobación la propuesta de la Junta Directiva por la cual el Grupo Vivir se haría cargo de la gestión del club, así como la correspondiente modificación estatutaria implícita en la conversión del club en Sociedad Anónima Deportiva.

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Didia Liedo, tomaba la palabra en primer lugar para exponer la situación excepcional en la que se encuentra el club, deudas por más de 300.000 euros, asuntos judicializados o la incapacidad para hacer frente a los compromisos de la próxima temporada deportiva. Liedo colocó al club al borde del abismo, señalando como única forma de asegurar la continuidad de éste otorgar el mando al Grupo Vivir.

La actual presidenta del Zamora CF aseguró que el trabajo realizado a cuatro manos por la Junta Directiva y los representantes del grupo empresarial ha cristalizado en una serie de compromisos concretos: un presupuesto ambicioso para formar una plantilla que consiga dar el salto de categoría, una apuesta decidida por el fútbol base, un calendario de pago a los acreedores, la negociación con Puma, para arreglar el conflicto que se está dirimiendo en los tribunales, o la liquidación de las cuentas pendientes con los jugadores de la plantilla y el cuerpo técnico.

Cerraba su intervención Didia Liedo instando a los socios para que optasen por “la ilusión”, dado que de no aprobarse la propuesta de la Junta Directiva habría que convocar una nueva asamblea con el único punto de la disolución del club. Palabras que provocaron los aplausos de los socios allí presentes. Acto seguido, Liedo enunciaba los puntos que deberían votarse en el plenario.

En el turno de preguntas varios socios tomaron la palabra para denunciar la falta de transparencia por parte de la directiva, o el excesivo poder, que en la redacción de la modificación de estatutos se define como “irrevocable”, que se otorga al Grupo Vivir hasta la conversión del club en Sociedad Anónima Deportiva. Los servicios jurídicos del club aclararon que el “poder” otorgado al Grupo Vivir decaería en el caso de no cumplir los compromisos redactados en el acuerdo y votados por los socios en la asamblea.

Una vez aclarados por parte de la presidenta los extremos del acuerdo en referencia al compromiso del grupo empresarial en torno a la deuda del club a través del prestamos de 350.000 euros, así como de la continuidad de los trabajadores del club, aunque aseguró que no sabía en qué condiciones, la asamblea se dispuso a votar la propuesta.

Votación nominal en la que los socios de número presente-algunos delegaron el voto- respaldaron por abrumadora mayoría, 111 votos a favor, 4 en contra y una sola abstención,  que se el Grupo Vivir el encargado de gestionar los designios del club rojiblanco.

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Una vez finalizada la aprobación, los responsables del grupo empresarial Alfredo Ruiz y Víctor de Aldama hicieron acto de presencia en la sala de conferencias de la Ciudad Deportiva. Lo primero que hizo Ruiz fue pedir un aplauso para los socios por haberles entregado la confianza y aseguró que los nuevos gestores ya trabajan en el pago a los acreedores y en la solución del tema de Puma, prometió transparencia y que los socios tendrán a su alcance toda la información que requieran.

Por su parte Aldama anunció que respetarán el número de carnet de los socios y que ya trabajan en la confección de una plantilla de garantías para ascender a la categoría de bronce del fútbol español, resaltó la palabra ascenso y “no jugar el play-off”. En lo referente a la conversión en SAD, Aldama instó a que el 40 % de las acciones que quedarán disponibles, tras la compra del otro 60% por parte del Grupo Vivir, deberían “quedarse en Zamora” animando a los socios a que se comprometiesen con el club de manera explícita.

A pocos metros del lugar en el que la afición del Zamora CF disfrutó de los pases de Garre, las paradas de Vicente Merino, los remates de Mateos o las galopadas de un imberbe Felipe Miñambres, el Zamora CF ponía punto y final a su historia como club para comenzar a escribir otra página ya como Sociedad Anónima Deportiva.