La justicia declara improcedente el despido de cuatro trabajadoras de la patronal valenciana
El juzgado de lo social condena a la extinta CIERVAL y las tres provinciales a readmitirles o indemnizarles con cuantías de hasta 100.000 euros
Valencia
Según ha podido saber la cadena SER, un juzgado de lo social de Valencia ha declarado improcedentes los despidos de cuatro trabajadoras de la extinta patronal autonómica CIERVAL, y las provinciales CEC, COEPA y CEV.
La sentencia obliga a las patronales a , o bien readmitir a las despedidas en iguales condiciones a las anteriores a su salida, o a indemnizarles con cuantías que oscilan entre los 14.000 y los 100.000 euros según los casos. Cuantías que se han fijado en función de su antigüedad en el puesto de trabajo y su formación.
El magistrado considera que, pese a la "singularidad" del caso (sustitución de una organización empresarial representativa por otra), concurre el supuesto de "sucesión empresarial", que ocasiona que la continuidad de la actividad empresarial "determine la responsabilidad solidaria de la cesionaria en las obligaciones laborales de la cedente respecto de las actoras y nacidas con anterioridad a la cesión".
Y en relación a la actual CECV, señala que el "mero cambio estatutario" en su ámbito de actuación y en su denominación, "no altera su condición de partícipe de la unidad empresarial" para la que las extrabajadoras prestaban sus servicios.
A las trabajadoras de Cierval se les notificaron en mayo de 2017 los despidos por extinción de la personalidad jurídica de la empresa y se les manifestó que no se ponía a su disposición la indemnización que les correspondía por "falta de liquidez". La antigua patronal había iniciado el procedimiento de despido colectivo para la extinción de los contratos con sus 15 empleados y el 11 de mayo de ese año se celebró una tercera sesión sin acuerdo de las partes.
Según la sentencia, Cierval asumió la participación institucional de las patronales de la Comunitat como organización empresarial representativa y para realizar su actividad optó a subvenciones públicas vinculadas a la realización de concretas actividades. En abril de 2017 un juzgado Mercantil admitió su solicitud y declaró su estado de concurso voluntario, que concluyó por insuficiencia de masa activa hasta que se declaró su extinción.
Las causas de esa situación se debieron al incumplimiento de las codemandandas CEC y COEPA de abonar sus cuotas y tener que hacer frente a expedientes de reintegro de subvenciones públicas obtenidas por Cierval y destinadas a las actividades de sus entidades fundadoras por la falta de justificación de las actuaciones a las que estaban vinculadas.