La sonrisa de hierro de Munar
Le quedan más de tres mil días de condena por graves delitos, pero el fin de semana le pertenecía

"La línea roja" de Matías Vallés (23/07/18)
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
PALMA
Maria Antónia Munar perdió la libertad y la consideración política, pero no ha perdido la capacidad de sorprender.
Era fácil reconocer a la Munar triunfal en la presa que el viernes abandonó la cárcel de Palma para un fugaz permiso de tres días.
Tal vez lucía un exceso de triunfalismo, dadas las circunstancias.
La sonrisa de hierro volvió al rostro de Munar.
Le quedan más de tres mil días de condena por graves delitos, pero el fin de semana le pertenecía.
Munar identificó a Mallorca durante treinta años.
En ese tiempo, nos acostumbramos a escrutar cada palabra, cada gesto, cada suspiro de la mujer que confundió el poder que ejercía.
Por eso hoy nos miramos en la sonrisa de Munar con cuidado, para no incurrir en la aberración óptica de olvidar que las víctimas son los mallorquines.
Lo contrario sería despreciar la labor de los funcionarios que desentrañaron la corrupción inacabable de UM al servicio de los ciudadanos
Dicen que Munar ha aprendido en la cárcel a confesar, Mallorca solo le pide una explicación.




