Al fresco del pueblo más alto de Cuenca en los días más calurosos del verano
Vega del Codorno, a 1.450 metros de altitud, es un municipio que se extiende por el valle del río Cuervo creando espacios naturales de gran belleza
Cuenca
Vega del Codorno tiene fama de ser el pueblo más alto de la provincia de Cuenca. Está a 1.450 metros de altitud. Pero Huélamo también se ubica a esta altura y no se lleva mucho con los 1.418 metros de Zafrilla. Les sigue Masegosa con 1.376. Por debajo quedan otros pueblos como Tragacete (1.283 m), Tejadillos (1.220 m) o Beteta (1.210 m).
Como gotas de rocío sobre la hierba, las casas de los barrios de Vega del Codorno aparecen en el paisaje del valle del río Cuervo. A lo largo de siete kilómetros y en uno de los lugares más altos de la provincia de Cuenca, los vecinos de este pueblo serrano tienen el ayuntamiento en un lugar y la iglesia en otro. Es una de las peculiaridades de la Vega. Pueblo que visitamos buscando el encanto en la distribución de los barrios, algunos de ellos ya deshabitados, y el fresco de estos parajes en plena canícula mediterránea.
El nombre
¿Qué le parece si para conocer mejor Vega del Codorno empezamos por el nombre? Lo de “Vega” está claro, este paraje se extiende por el valle encajonado que abre el río Cuervo; lo de “codorno” es porque, en otros tiempos más que ahora, había por aquí muchas codornices. El codorno es el macho de la codorniz. Era tierra de caza. El encanto de Vega del Codorno está precisamente en el paisaje que envuelve el lugar, un valle cerrado que sólo tiene una entrada por el barrio de El Perchel, por donde entra el río Cuervo. La otra característica que hace original y único a la Vega en toda la provincia es la dispersión del núcleo urbano. Está dividido en varios barrios dispersos a lo largo de los siete kilómetros del valle, pequeñas manchas blancas de casas sobre el verde de la vegetación.
Pueblo ganadero
El origen del pueblo es ganadero. Las malas condiciones para desplazarse, sobre todo en invierno, hizo que los vecinos construyeran sus casas y se quedaran a vivir en los lugares de trabajo, donde estaba la herrería o, un poco más abajo, donde el molino,... Todos estos detalles convierten a Vega del Codorno en uno de los municipios más pintorescos de la Serranía.
Barrio a barrio
Comencemos el recorrido, río abajo, por donde las aguas del Cuervo, que nace unos kilómetros más arriba, ponen música a un paseo que podemos hacer andando, visitando cada uno de los barrios. El primer barrio es el del Perchel. Aquí se conservan las ruinas de una antigua peguera, lugar en el que se hacía la pez, material que se sigue utilizando, por ejemplo, para la elaboración de botas de vino pero que se ha visto desplazado por los actuales pegamentos. También había un molino y una herrería donde se fundía el hierro que se traía desde Ojos Negros, en Teruel.
Sigue nuestro paseo hasta el barrio de Los Perales, uno de los más pequeños en el que, hasta hace unos años, existía una presa y un molino de pienso. Llegamos ya al barrio de La Cueva, el de mayor población. Aquí está el Ayuntamiento y a su puerta, el Monumento al Hacha, homenaje a los madereros de estas tierras. Este barrio debe su nombre a la gran cueva natural que hay sobre las casas, lugar en el que cada Navidad, desde hace más de 50 años, los más pequeños de la Vega representan un “Belén Viviente”. La cueva tiene una altura de más de 12 metros y una anchura de unos 25. Hay espacio para los actores y para el público.
Siguiendo el recorrido llegamos al Collao, lugar donde está la iglesia y el cementerio. Le sigue el barrio de Los Eustaquios que debe su nombre a los primeros habitantes aunque también se le conoce como el del Chopo. Nos quedan en el recorrido otros dos barrios habitados, Los Demetrios y Los Migueletes o barrio de La Hoz. Todavía hay otros barrios, ya desabitados, el de Las Chorreras y el de Los Gregorietes. Son, en definitiva, barrios dispersos con población escasa que puede oscilar entre los cien que viven en La Cueva y los menos de diez de El Perchel o los tres o cuatro de Los Perales. En total menos de 200 habitantes.
La Tobilla
Al final del valle, pasado el barrio de Los Eustaquios, el paisaje nos tiene reservada una sorpresa. Si seguimos por la carretera en dirección a Santa María del Val, pasados cinco minutos veremos un cartel a la derecha que indica ‘La Tobilla’. La ruta sigue después por un camino de tierra, el de las Vaquerizas, como lo conocen los vecinos, durante unos dos kilómetros para plantarnos ante una cascada natural que se parece mucho al cercano Monumento Natural del Río Cuervo.
Un pueblo especial
El hecho de que esté dividido en barrios hace que la vida en Vega del Codorno sea distinta. A nivel municipal es muy complicado tener que hacer un arreglo de calles, de aguas o de luces, es como arreglar siete pueblos, nos comentan en el Ayuntamiento. Para los vecinos supone también que haya personas, sobre todo gente mayor, que no se vean en mucho tiempo. El valle tiene siete kilómetros del primer al último barrio. En algunas ocasiones estos lugares se han quedado aislados durante varios días en los duros y largos inviernos de la Serranía de Cuenca cuando cae una gran nevada y que aquí, por ser el pueblo más alto, llegan primero los copos.
Paco Auñón
Director y presentador del programa Hoy por Hoy Cuenca. Periodista y locutor conquense que ha desarrollado...