Sergio González se despide abiertamente de la Arandina

Aranda de Duero

Había preferido mantenerse al margen. Decidió separarse levemente de todo cuanto había sucedido, pero quería esperar al momento preciso para hablar. Y ese momento ha llegado este martes. Sergio González, ex directivo de la Arandina y ex entrenador de su equipo Nacional Juvenil, ha compartido hoy en redes sociales un comunicado en el que se sincera sobre lo que ha sido una larga vida dedicada al blanquiazul. Él y su padre Juan -delegado con muchos años de solera en el club- salieron hace poco menos de dos meses por la puerta de atrás, sin el reconocimiento que su figura merece, sin un simple agradecimiento, y lo que es peor, sin la rectificación de una acusación como la que vertió el presidente del club sobre él y que no daba lugar porque no sucedió.

Pedro García afirmó que González (junto a los otros dos directivos cesados) tuvo contacto –en su caso a través de un whatsapp- con un socio que hace dos años intentó presentar una candidatura para presidir el club. Este medio de comunicación ya desveló hace varias semanas que dicho mensaje no existía, porque directamente ese socio no disponía siquiera de esta aplicación. Sin embargo en la Asamblea de Socios, en la que García esgrimió que conocía esa "traición" hace cuatro meses, no hubo rectificación ni disculpas hacia Sergio, que nada tenía que ver.

Este martes González lo ha dado a conocer, y reitera que el presidente del club miente también “cuando dice que los Estatutos avalan que puede tomar ese tipo de decisiones, consciente de que no lo permiten”. Además, el ex directivo revela que Pedro le aseguró hasta en tres ocasiones que sería el entrenador del primer equipo juvenil, y que nadie se podría poner por encima suyo en esa decisión “porque para eso era el presidente”.

Pese a todo, González le desea “suerte” a Pedro “en cumplir su compromiso de dejar al club en Segunda B y sin deuda, aunque viendo que tampoco es capaz de cumplir con sus compromisos personales con la Arandina, lo veo complicado”. “Tendrá que dedicar bastantes más horas al club de las que ha dedicado hasta ahora”, añade.

JAVIER ALMENDÁRIZ

El ex directivo también ha sido sincero con el secretario del club, reflejando que es “evidente” que le odia, que trajo como entrenador a Diego Rojas “con el que tenía relaciones empresariales” y que “es el presidente en la sombra, tomando decisiones dictatoriales al margen de la legalidad que exigen los Estatutos”. De la misma manera lo acusa de diversas irregularidades de las que no ha rendido cuentas. “Antes o después acabaría por adueñarse de la Arandina”, asevera.

González también ha querido echar en cara a Almendáriz que sí han salido jugadores de la cantera al primer equipo pese a que él diga lo contrario, y le ha acusado de “no haber ido a más que a 10 partidos de los 120 disputados en categoría nacional”. Además, afirma que le ha impedido que entrenara esta temporada “entre otras muchas cosas por una razón familiar suya, por la que este año sí vera los partidos del juvenil”.

Sergio, con una vida entregada a la Arandina, ha querido desearle suerte al secretario del club, a pesar de que nunca le hayan reprochado gestiones como la que llevó a cabo cuando trató de aumentar las ganancias de los 82 socios que disponían de un boleto premiado en la Lotería Nacional con un número correspondiente al club, tratando de repartir el premio total (y afectando así al que más ganancias había logrado) entre todos los afortunados.

“Con ir 10 minutos antes a los palcos a figurar no se cubre el presupuesto”, señala González, que no quiso cerrar su comunicado sin agradecer a jugadores, amigos y socios todo el apoyo que ha recibido durante estas últimas semanas muy duras para él y para su familia, a quien también muestra gratitud por ayudarle “a amar unos colores y un escudo”. “A nadie tenemos que demostrar que llevamos en el alma y en el corazón a la Arandina y en nuestras venas sangre blanquiazul”, sentencia