Con la moral alta

Aranda de Duero

Después de haber insistido en el triunfo, de haberlo logrado en última instancia y de haber sumado los primeros tres puntos de la temporada, la Arandina afronta su primer duelo a domicilio y no será en un escenario sencillo. Los blanquiazules visitan este domingo (18.00 horas, La Arboleda) a un Almazán dolido tras el duro correctivo (6-1) sufrido el pasado fin de semana ante el Atlético Astorga.

El orgullo herido del cuadro adnamantino será uno de los principales problemas para la escuadra blanquiazul. Según afirma Diego Rojas, entrenador del cuadro soriano y ex entrenador de la Arandina, “cometimos tres errores graves en los primeros minutos y tuvimos fallos que no podemos permitir… eso ante un rival fuerte se nota mucho”, asegura. Aunque también advierte de cara al próximo choque. “No se lo pondremos nada fácil para ganar”.

El entrenador burgalés espera a un rival “que ejercerá una fuerte presión, con mucha calidad y velocidad y que buscará seguramente hacerse con todas las segundas jugadas… en el último partido jugaron 6 ó 7 jugadores que yo entrené el año pasado, tienen un estilo muy marcado pero sabemos que será muy difícil”, sentencia Rojas.

SIN BAJAS

La Arandina está más que preparada para afrontar el choque. Nuevamente Javier Álvarez De los Mozos deberá realizar cuatro descartes, dado que Sola sigue enrolado en el primer equipo. Todos los jugadores están disponibles para un técnico que quiere “encontrar un once provisional” y que ha reconocido que la plantilla de esta temporada es mejor que la del pasado curso. “Tenemos mejor equipo, los jugadores que se quedan en el banquillo o la grada esta temporada son mejores que los que se quedaban el año pasado”, aseguraba.

No se fía De los Mozos de su rival, y aunque sabe que la estadística de la Arandina en La Arboleda no es buena -exceptuando los últimos años- recuerda que “el año pasado ya ganamos allí 0-2 y haciendo muy buen partido”. Un partido en el que habrá reencuentros con ex jugadores blanquiazules, y con Khalifa, que se encuentra cedido en tierras sorianas en búsqueda de minutos.

Respecto al once inicial no se esperan muchos cambios. Barahona fue un revulsivo destacado en el debut frente al Bembibre, pero parece difícil quitarle el puesto a Rodrigo Escudero, cumplidor y en un buen estado de forma. En punta Diego Abad está en las mismas, pero ha de competir con la dupla Rubiato-Adeva que se entiende muy bien sobre el verde. Las dudas parecen estar más implantadas en la zona ofensiva que en la defensiva, donde no se esperan modificaciones. Lo que sí sorprendió respecto al primer choque fue la completa reconversión de posición para Zazu, que parece haberse quedado con el lateral izquierdo.

Muchas son las cábalas y pocas las opciones, pero lo que está claro es que esta Arandina apunta maneras con tanta competitividad y nivel. Sin embargo, todo ello hay que refrendarlo sobre el campo, y no hay mejor lugar para hacerlo que donde históricamente siempre ha costado ganar. Sumar dos triunfos como inicio mantendrá la moral alta, y demostrará que este equipo tiene mucho que decir en un grupo octavo que promete.