Un trago amargo
El Oviedo queda apeado de la Copa del Rey tras caer 1-0 ante el Mallorca en un partido con un pobre balance ofensivo.
Oviedo
El Real Oviedo ha caído eliminado, por cuarto año consecutivo, en la primera ronda de la Copa del Rey tras perder 1-0 frente al Mallorca en Son Moix. El conjunto azul apenas inquietó la portería rival durante todo el encuentro y el equipo bermellón rentabilizó al máximo sus acercamientos al área contraria. Los hombres de Juan Antonio Anquela apostaron por tener la posesión del balón y el control del partido, pero los futbolistas de Vicente Moreno estuvieron relativamente cómodos, esperando en su campo y saliendo a la contra cuando a los ovetenses se les acababan las ideas en zona de tres cuartos.
Anquela realizó ocho cambios en su once respecto al equipo titular que sacó en la última jornada de Liga ante el Zaragoza, y jugadores como Champagne y Carlos Martínez debutaron en competición oficial con la elástica azul, también lo hicieron los futbolistas del filial Javi Hernández y Edu Cortina. Este último entró a los 26 minutos de partido tras la lesión de Sergio Tejera, y en el caso del defensa andaluz, que fue de lo más destacado, disputó todo el encuentro en el lateral izquierdo.
El guion del partido prácticamente no sufrió variación alguna a lo largo de los 90 minutos, con la sensación de que por mucho que durase el choque, no iba a llegar el gol visitante. Si acaso destacar una diferencia, la forma de tener la pelota unos metros más adelante en el primer tiempo respecto al segundo, que casi todo el juego se disputó en el centro del campo. Las ocasiones de peligro de los ovetenses en el primer acto, y en la totalidad del partido en general, se resumen en un disparo desde fuera del área de Javi Hernández, siendo un balón fácil de detener para Parera. Al Oviedo le faltó movilidad y profundidad ofensiva, además de concretar un último pase para que los delanteros pudiesen rematar alguna pelota en buenas condiciones.
Durante los primeros 45 minutos, las posibilidades de hacer más daño las tuvo el Mallorca, a pesar de que era el Oviedo quien tenía el dominio del esférico, pero sin concretar ninguno de sus acercamientos. Sin embargo, los locales tuvieron dos remates de Stoichkov que fueron bien detenidos por Champagne, y otro de Valcarce, de cabeza, que se marchó fuera por poco.
Ya en el segundo período llegó el único tanto del encuentro. Fue en el minuto 57 tras un balón diagonal, que no pudo ser despejado por Carlos Martínez a la hora de cerrar la acción, circunstancia que aprovechó Ferrán Giner para ocupar la zona que dejó vacía el lateral navarro, y conectar un zurdazo imparable para Champagne, que entró pegado al poste. Desde ese momento y hasta el final del partido, aunque Anquela dio entrada a Bárcenas y Joselu, los azules no fueron capaces de acelerar el ritmo de su juego, se mostraron previsibles y con muy poca creatividad en ataque.
El Mallorca pasa a la siguiente ronda con lo mínimo y el Oviedo se centra en la Liga después de mejorar sensiblemente su imagen, pero sin ningún tipo de mordiente ofensiva. El próximo compromiso de los carbayones será frente al Lugo en El Anxo Carro (domingo, 16:00 horas).