Con Eusebio empezó todo
El entrenador del Girona sacó en Vigo a una buena remesa de canteranos
Vigo
Eusebio Sacristán dejó una huella en Vigo imborrable y que todavía perdura. Su llegada al Celta se produjo en un momento complicado, el equipo vigués deambulaba sin rumbo en la Segunda División. Todos tenemos en mente aquel agónico partido en Balaídos ante el Deportivo Alavés. El 6 de junio de 2009 el equipo vigués se jugaba la vida en casa. Literal, porque el descenso a Segunda División B estaba en juego. Y el Celta ganó con un partido en el que Aspas se coronó, con dos goles, y salvó al club de la desgracia del descenso. Al club y a un Eusebio que tenía la papeleta de arreglar el desaguisado que habían dejado los entrenadores anteriores.
Permanencia y nueva vida. Y con él empezó todo. La situación económica no era la mejor y eso impedía el fichar jugadores de nivel. Su gusto por la cantera dio sus frutos en Vigo. Un buen número de jugadores formados en A Madroa tuvieron la oportunidad de ascender y consolidarse en el primer equipo. Iago Aspas, Hugo Mallo, Yoel, Toni, Túñez, Álex López...fueron algunos de los canteranos que tuvieron su oportunidad con Eusebio.
Ahora en el primer equipo todavía se mantienen Aspas y Mallo, de los que el de La Seca guarda gran recuerdo y viceversa.
El lunes el equipo vigués visita a un técnico que dejó huella en Vigo (como jugador y como entrenador), ahora al frente del Girona y con otro vigués, Juan Carlos Andrés, en su cuerpo técnico.