Son los profesores, estúpido
son el único filtro que atraviesa obligatoriamente toda la población de Balears, por lo menos mientras no se difunda la educación a domicilio
"La línea roja" de Matías Vallés (14/09/18)
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PALMA
Ha comenzado el curso pero, más allá del recuento de barracones, profesores y alumnos, no recuerdo un solo mensaje sobre la importancia de la educación.
Por lo visto, solo importa el turismo.
Se habla menos de los profesores que de los hoteleros, que son los ganaderos y ganadores contemporáneos.
Los hoteleros quieren una cultura de kellys, los profesores aspiran a algo más para sus alumnos.
A diferencia de Balears, en la Diada catalana del martes se hizo un llamamiento y un homenaje a los educadores.
Por algo será que las universidades catalanas son las mejores de España.
Bill Clinton llegó a presidente de Estados Unidos con el eslogan “es la economía, estúpido”.
Ha llegado pues el momento de gritar que “son los profesores, estúpido”.
Además, son el único filtro que atraviesa obligatoriamente toda la población de Balears, por lo menos mientras no se difunda la educación a domicilio
Digo profesores y no colegios, porque por fortuna los centros educativos no pueden cortar a su profesorado por el patrón uniforme que desearían.
Son los profesores, para que no seamos más estúpidos.
