Vuelta al cole
(...) Huyendo de las miserias políticas que nos ahogan, quizás no sea mal momento para recordar algunas obviedades que ayudan a educar mejor a nuestra infantería, a educarnos mejor (...)

La opinión de Juan Miguel Alonso
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León
Se vuelven a llenar las aulas de una algarabía juvenil y eterna. Hay besos y abrazos en el reencuentro. Noticia sin fin de la aventura estival y propósito de enmienda en las almas inquietas. Mochilas nuevas y cigarrillos a escondidas en el callejón de La alhóndiga. Algunas miradas enamoradas en el pasillo y análisis freudiano al nuevo de Lengua o a la de Francés, que dicen que es chunga que te cagas. Todo regresa a la normalidad de las hojas caídas y los bocatas al recreo.
Por eso, huyendo de las miserias políticas que nos ahogan, quizás no sea mal momento para recordar algunas obviedades que ayudan a educar mejor a nuestra infantería, a educarnos mejor. A saber:
1.-Educa la tribu entera. No coloquemos en la escuela una responsabilidad que es colectiva.
2.- La educación es mucho más que un catálogo de conocimientos. Es, sobre todo, valores como respeto, libertad, compromiso, solidaridad, esfuerzo. La escuela será un fracaso si no es ayudada en esta empresa por lo que hay extramuros.
3.- La escuela pública es un tesoro que precisa medios para atender a la diversidad, para ofrecer una auténtica calidad, para acoger a los que nadie quiere. Cuidémosla.
4.- Nuestros alumnos son, a menudo, perfectos desconocidos para nosotros. Su contexto es imprescindible para entenderlos y ayudarlos. Quiero decir: si la familia no está en este proceso, la cosecha será ruinosa.
5.- Hay un universo nuevo que se llama Redes Sociales. Esa constelación de instagramers, youtubers y whatsapp está llena de prodigios, pero también de basura. El lugar del mundo donde viven nuestros hijos es la pantalla de un móvil. Urge que nos pongamos con esa materia cuanto antes.
6 y última. Nada es más didáctico que el ejemplo. La imagen de un padre o de una madre con un libro en la mano vale más que todos los tratados de pedagogía de la Universidad de Michigan. Ánimo en la travesía, que viene de ánima, el alma. Ese viento que nos empuja a todos hacia Ítaca.




