El Pablo Herrera foco de conflicto partidista
Opinión Xavi Sidro
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Siempre ha pensado que los partidos políticos se crearon para servir al ciudadano o al menos a la mayoría de los ciudadanos que son los que les otorgan sus puestos en las instituciones, pero en muchas ocasiones, queda patente que los partidos políticos, piensan más en ellos, en el partido y en asegurar el puesto de sus políticos, que en el bien del ciudadano de a pie.
El ejemplo claro, la situación del pabellón Pablo Herrera quien desde hace ya muchos meses se ve a afectado por las goteras, al margen del abandono prácticamente total que ha sufrido en los últimos 30 años.
El Pablo Herrera, inundado tras las últimas lluvias necesita una reforma urgente y entre la Diputación y el Ayuntamiento, entre el tuyo y mío, mío y tuyo, sigue estando cada vez peor.
El PP de Diputación no quiere pagar las obras porque dice que la instalación está cedida al ayuntamiento para su uso, que ellos son los que cobran las cuotas a los clubes y que por tanto ellos lo han de pagar, pero obvian que la cesión fue un acuerdo verbal del pasado con el ayuntamiento, de cuando el PP reinaba en esta institución, un acuerdo que no existe por escrito.
Compromís del Ayuntamiento, sí está dispuesto a pagar los 380 mil euros que cuesta la obra, pero necesita la cesión formal del uso, a la que la Diputación está dispuesta a acceder, pero, a amigo, resulta que su socio de gobierno, el PSOE no quiere autorizar la reforma.
El PSOE del Ayuntamiento lo que quiere es la propiedad de la instalación para entonces sí, pagar esa reforma, pero claro la Diputación no quiere regalarle ese patrimonio así porque sí.
En definitiva, entre PP, PSOE y Compromís no hay acuerdo, y a pagarlo los clubes, sus jugadores y las familias que disfrutan del voleibol en la ciudad
Al final es lo de siempre. Todos piensan en partido y no en ciudadano y esto es una vergüenza.
Señores políticos han sido elegidos para servir al pueblo y no para servirse a ustedes mismos. Siéntese alrededor de una mesa y arréglenlo. Da igual quien lo pague, si el ayuntamiento o la diputación, pero páguenlo, que el dinero lo ponen todos los ciudadanos y no ustedes de sus bolsillos.