"Es un peligro que vayan así al cole"

Lorca

Llueva o haga frío, con un sol de justicia o con el viento soplando en contra, cada día más de una treintena de alumnos del CEIP Pasico-Campillo de Lorca caminan casi dos kilómetros a pie, ida y vuelta, para llegar a clase, por el arcén de la carretera, con turismos, camiones pesados y maquinaria agrícola pasando a su alrededor.

"¿Qué hacen aquí esos niños?", se preguntarán muchos conductores que a la hora de la entrada o salida de clase se encuentre con estos menores, cuyos padres y madres se organizan para llevar en grupo a diario y evitar así las situaciones de peligro que pueden darse por caminos de la huerta de Lorca muy transitados por residentes y trabajadores del campo de la ciudad.

Es la situación que denuncian algunos de estos padres, como José Andrés Terrones, que dice que la situación se remonta al curso pasado y ha contado cómo lo llevan en la antena de la Cadena SER: "Es una zona bastante peligrosa para que los niños vayan andando solos al colegio", nos cuenta.

La problemática arranca cuando concluye la construcción del nuevo aulario de educación infantil de este colegio, hasta ahora separado del resto del centro. Al unificar ambas líneas educativas, muchos de estos alumnos ya no se encontraban a tres kilómetros de su colegio, por lo que la Consejería de Educación suprimió la línea de transporte que utilizaban y dejó sin servicio a buena parte de ellos.

"Hay mucha peligrosidad en el camino desde las paradas suprimidas hasta el colegio. Pedimos una línea de autobús para que los niños puedan ir seguros a clase", pide este padre, que señala también que tanto la Consejería de Educación como el Ayuntamiento de Lorca son conocedores del problema sin haber hecho nada todavía: "Nos dijeron que lo iban a estudiar, pero nada".