"Desde niña jugaba a ser Guardia Civil con los uniformes de mis padres"

Huelva

Se cumplen 30 años de la incorporación de la mujer a la Guardia Civil y en "Hoy por Hoy Huelva" hemos conocido los testimonios de dos agentes que nos han contado su experiencia en este cuerpo.

No ha sido fácil, pero lograron romper un techo de cristal. Las casi 200 mujeres que entraron hace 30 años, por primera vez, en el Cuerpo de la Guardia Civil celebran hoy la apertura del Cuerpo, los avances conseguidos y la accesibilidad que van teniendo las nuevas promociones.

María José Suárez es agente de la Guardia Civil en Huelva, madre de dos hijos. Trabaja en intervención de armas y pertenece a la primera promoción de mujeres Guardia Civiles tras el Real Decreto Ley que permitió a las Mujeres acceder a las pruebas de acceso y hacerlo en igualdad de condiciones que los hombres. La Guardia Civil Suárez esta llena de anécdotas. Cuenta que una vez un ciudadano se nego a hablar con ella por el mero hecho de ser mujer. Hubo que luchar contra estereotipos de dentro y fuera del Cuartel. Señala que se han logrado metas, aunque todavía la lucha no ha terminado. Sobre los uniformes aún se sigue a la espera de que adapten al cuerpo femenino el chaleco antibalas de seguridad.

Entretanto Raquel de 21 años y agente de la Guardia Civil en prácticas saluda los avances que las primeras Guardias Civiles consiguieron y nos cuenta que a ella le viene por tradición familiar. Siempre quiso pertenecer al Cuerpo. Todavía hoy recuerda como jugaba de pequeña a ser Guardia Civil con sus hermanos utilizando la ropa de sus padres. La agente Raquel aspira a especializarse y siente preferencia por la labores en el mar.

Con todo, el camino de la igualdad parece estar más labrado, no tanto el escenario de la paridad que nos muestran los datos. Sólo en la Comandancia de Huelva conviven 81 mujeres Guardias Civiles frente a los 1.251 hombres.