Elegir entre la comida o los medicamentos, una difícil decisión
La ONG Banco Farmacéutico ayudará en Zaragoza a 150 pacientes crónicos que no pueden pagar su medicación en Zaragoza capital. Se han adscrito al programa 5 centros de salud y 30 farmacias

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Zaragoza
Elegir entre comer o medicarse. 74.500 personas en Aragón se enfrentan a esta disyuntiva. Son casi el 6 % de la población aunque el porcentaje de situaciones graves es menor. La ONG Banco Farmacéutico ha puesto en marcha en Zaragoza un fondo social al que se han adherido 5 centros de salud y 30 farmacias. El objetivo es financiar este año los gastos farmacéuticos de 150 pacientes crónicos.La iniciativa se puso en marcha en 2015 en Barcelona y ahora se implanta en la capital aragonesa.
El médico de cabecera es el que detecta las dificultades de un paciente para poder comprar sus medicamentos y los deriva a la trabajadora social que los incluye en el denominado Fondo Social de Medicamentos.
¿Qué tipos de casos se atienden?Jordi Boch, del Banco Farmacéutico, explica que "hay personas en una situación de vulnerabilidad en el tema de salud fundamental, y hay que dar respuesta". Avisa que "nosotros no podemos responder a estas 74.000 personas pero sí lo podemos hacer a los casos más graves, que muchas veces están vinculados a situaciones de una complejidad familiar impresionante". Como pequeña entidad, "lo que estamos haciendo es responder a esas necesidades". Además, "muchas veces esos tratamientos son caros".
El perfil es el de un paciente crónico, de unos 50 años de edad que ya no cobra el subsidio por desempleo y que está de baja médica. Son casos en los que no puede aportar el 40 % del coste del fármaco. Es decir, "una persona con muy pocos ingresos, tiene las cargas típicas de una familia, con dificultad de acceso al mundo laboral y acaba siendo una pobreza cronificada y vergonzante fruto de la crisis que no ha aflorado, que está ahí, y que tiene dificultad para pagar el medicamento". Además, en muchos casos ocultan sus dificultades, que "tiene vergüenza a decir que vive esa situación".
A esto se añade que en un alto porcentaje son niños los que tienen un difícil acceso a un tratamiento. Así, "hay un 17% de nuestros beneficiarios que son menores de edad, con asma O TDH" pero también "tratamientos oncológicos, diabéticos o del corazón".




