Cómo empezar bien, desde el principio
El objetivo que debemos buscar al arrancar una charla no es otro que el de conseguir que la mayoría de la audiencia solo quiera seguir escuchándonos

El objetivo que debemos buscar al arrancar una charla no es otro que el de conseguir que la mayoría de la audiencia solo quiera seguir escuchándonos / Pixabay

Alcobendas
Está demostrado que el principio, junto a otros elementos, es de las cosas que mejor se recuerda de una exposición. Además, no podemos olvidar que éste marca el tono de una charla y si no conseguimos captar la atención desde el primer momento, nos va a costar mucho recuperar a la audiencia.
Por ello, el inicio, esos primeros minutos, debe estar perfectamente ensayado e interiorizado, evitando a toda costa optar por la improvisación. El objetivo que debemos buscar al arrancar una charla no es otro que el de conseguir que la mayoría de la audiencia solo quiera seguir escuchándonos. Que tengan el pensamiento de “qué bien, esto me va a gustar / esto me interesa”.
Para ello, deberemos huir de las fórmulas estándar, optando por otras más creativas como contar una historia personal que esté conectada con el tema a tratar durante la charla, lanzar una pregunta, decir un eslogan, … Y todo ello, sin olvidar crear una conexión con la audiencia a través de nuestro contacto visual, sonrisa, etc.
Otra de las ventajas de tener nuestro inicio bien ensayado es que nos ayudará a mantener a raya el miedo escénico, ya que nos aportará mucha seguridad el hecho de saber lo que tengo que decir. Así nos lo cuenta Marina Estacio en nuestra sección de Comunicación Personal de esta semana.
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Comunicación Personal: Cómo empezar bien, desde el principio

Nacho López Llandres
Desde 2005 presento el tramo local de Hoy por Hoy en la zona norte de Madrid, además de contar noticias...




