Josep Tur, convencido de que "se ha cumplido la legalidad" con el chiringuito de Cala Gració

Sant Antoni de Portmany

Este jueves ha declarado ante el juez el alcalde de Sant Antoni, Josep Tur, investigado por un presunto delito de prevaricación por no haber concedido la licencia de actividad al chiringuito de Cala Gració. También están investigados en esta causa, recordemos, la concejal de Urbanismo, Cristina Ribas y dos técnicos municipales.

Tur dice que han contestado a todo lo que el juez les ha preguntado en relación a la denuncia que presentaron los propietarios del chiringuito, que acusan al Consistorio de denegarles el permiso de apertura pese a que contaban con las autorizaciones necesarias para explotarlo. El primer edil afirma que han aportado toda la documentación que se les ha requerido y se muestra convencido de que la justicia les dará la razón.

El alcalde asegura que están a la espera del informe que han encargado a una jurista externa y después estudiarán con los servicios jurídicos municipales los próximos pasos a dar. Aunque reconoce que ahora será la justicia la que tendrá que pronunciarse en uno u otro sentido, confía en que les dé la razón y no se plantea que los propietarios del chiringuito puedan tener derecho a indemnizaciones.

Tur afirma que siempre han actuado de acuerdo a la legalidad porque existían informes contradictorios que ponían en duda la legalidad del permiso otorgado por la Demarcación de Costas.