La torrentada arrastra al jefe de Policía
Jarabo llevó el teletrabajo al extremo y su ausencia le ha costado una destitución anticipada

"La línea roja" de Matías Vallés (25/10/18)
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PALMA
El diluvio de Sant Llorenç alteró la rutina de miles de mallorquines.
En cambio, el jefe superior de policía de Balears ni se inmutó.
Antonio Jarabo se hallaba de vacaciones en Canarias el martes en que se desencadenó la catástrofe, y no modificó su asueto en las islas más afortunadas que las nuestras.
Es decir, Pedro Sánchez voló de urgencia de Madrid a Balears en la mañana siguiente a la catástrofe.
En cambio, su jefe de policía en la comunidad consideró que el desplazamiento no le valía la pena.
Tanto el Gobierno como el Govern consideran intolerable que Jarabo solo regresara a Mallorca a tiempo para saludar a los Reyes en los funerales por las trece víctimas mortales.
Jarabo llevó el teletrabajo al extremo y su ausencia le ha costado una destitución anticipada.
La torrentada arrastra así al jefe de Policía, la primera víctima política del diluvio.
Jarabo quiso imitar a aquel director general de Tráfico del PP que controlaba por internet desde Sevilla el colapso estatal de las carreteras.
Y por supuesto, solo es casualidad que Jarabo sea un cargo nombrado y afín al PP, destituido ahora por el PSOE.




