Los vallisoletanos despiden a Rodríguez Bolaños
La capilla ardiente instalada en el Ayuntamiento, registró un constante trasiego de vecinos y amigos
Valladolid
Los restos mortales de Rodríguez Bolaños llegaron en la tarde del sábado al Ayuntamiento de Valladolid, donde fueron recibidos por su familia, una amplía representación de la Corporación Municipal, agentes de la Policía Municipal con uniforme de gala, dos maceros, así como por miembros del cuerpo de Bomberos de la ciudad, que decidieron acudir de forma voluntaria.
La viuda de Rodríguez Bolaños, Irene, y sus tres hijos -Jorge, Marta y Pablo- llegaron al Ayuntamiento de Valladolid en torno a las 19.15 horas. Su presencia hizo que numerosas personas, que se encontraban a las puertas del Consistorio, se arremolinaran en torno a ellos para transmitirles el pésame. Fundidos en un abrazo, junto a la estatua del conde Ansúrez, en la plaza Mayor, recibieron el féretro, que llegó escoltado por motoristas de la Policía Municipal.
Los aplausos de los vallisoletanos congregados en la plaza Mayor, que se extendieron también desde dentro del Consistorio, por quienes hacían cola para dejar su firma, recibieron ya entrada la noche a los restos mortales de Tomás Rodríguez Bolaños. A continuación, ocho agentes de la Policía Municipal, con uniforme de gala, portaron el féretro hasta el salón de recepciones.
Minutos después, sobre las 19.54, el féretro entró en el Ayuntamiento de su ciudad natal entre aplausos, seguido por la familia y con algún vítor de “viva el alcalde de Valladolid”. La muchedumbre no dudó en aguardar en la plaza Mayor la llegada de los restos mortales en medio de un silencio solo roto por aplausos hasta que se vislumbró el féretro.
Los restos mortales del exalcalde socialista, que murió de un infarte este viernes, pasarán la noche en el salón de recepciones, tras cerrar sus puertas la capilla ardiente, en torno a las 23.00 horas. Mañana domingo está previsto su traslado al cementerio de Las Contiendas de Valladolid, donde se celebrará mañana por la mañana un velatorio en la más estricta intimidad y, posteriormente, está prevista, por la tarde, la cremación.
Un gran número de vallisoletanos acudió al Ayuntamiento para poder despedirse del que fuera alcalde de la ciudad durante 16 años. De hecho, las colas a última hora de la tarde se alargaron por la escalinata del Consistorio hasta la plaza Mayor. También la capilla se llenó de coronas de flores, como muestra de cariño y afecto, de instuciones, como el Senado y las Cortes, los partidos, como el PSOE de Castilla y León, Izquierda Unida de Valladolid o el PP vallisoletano, así como las asociaciones vecinales o Renault España, entre otros.
Adiós multitudinario
El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, y el vicepresidente del Ejecutivo y consejero de la Presidencia, José Antonio de Santiago-Juárez, pasaron por la capilla ardiente para trasladar su pésame a la familia y amigos del fallecido. También lo hicieron el secretario general del PSOE en la Comunidad, Luis Tudanca; su ''número dos'' y delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, así como el secretario general de Infraestructuras del Ministerio de Fomento, Javier Izquierdo.
Asimismo, el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, no pudo participar en el velatorio de este sábado en el Ayuntamiento al encontrarse fuera de la ciudad, a más de mil kilómetros. No obstante, asistieron el regidor en funciones, Manuel Saravia; el portavoz del Grupo Municipal Socialista, Pedro Herrero; la portavoz de Valladolid Toma la Palabra, María Sánchez; las ediles socialistas Victoria Soto, Rafaela Romero y Ana Redondo, así como los concejales de esta formación, Antonio Gato y Luiz Vélez, visiblemente emocionado.
Manuel Saravia también tomó la palabra para recordar al "gran" alcalde de Valladolid. "En su momento ya habrá tiempo de glosar su trabajo y lo que hizo", afimó. "Lo único que cabe decir desde el propio Ayuntamiento es gracias Tomás, nada más", lo que fue contestado por los asistentes con aplausos.
Además, acudió también otro exalcalde, el ‘popular’ Francisco Javier León de la Riva, quien sucedió en la Alcaldía a Rodríguez Bolaños en 1995, cargo en el que se mantuvo durante 20 años, hasta 2015. También quiso asistir el presidente de la Diputación y el PP en la provincia, Jesús Julio Carnero; el presidente del Grupo Municipal Popular, José Antonio Martínez Bermejo, el senador del PP Miguel Ángel Cortés, o el ''popular'' Tomás Burgos, entre otros.
De la misma forma, la diputada socialista por Valladolid Soraya Rodríguez, que también fue candidata a la Alcaldía de la ciudad, no dudó en participar en esta despida pública a su compañero de partido, como la secretaria provincial del PSOE, Teresa Rodríguez; la eurodiputada Iratxe García; el exsecretario general del PSCyL, Ángel Villalba, o el histórico dirigente socialista Jesús Quijano, bastante afectado.
“Muy feliz”
Pablo Rodríguez, el hijo menor del exalcalde de Valladolid Tomás Rodríguez Bolaños, tomó hoy la palabra, tras la llegada del féretro con los restos de su padre, para agradecer las muestras de cariño de “mucha gente” y para recodar una lección de vida de su progenitor, fallecido este viernes en Vizcaya. “Siempre nos decía una cosa, que él estaba donde le había tocado estar”, recordó.
“Está muy feliz de estar aquí”, afirmó. Además, agradeció que tanta gente pasara por el Consistorio para despedir a su padre. “No tenemos más que palabras de agradecimiento para todo el mundo”, afirmó. “Mi padre siempre nos decía una cosa que él estaba donde le había tocado estar y si hubiese sido otra persona hubiera sido otra persona haciendo las cosas bien”, afirmó ya que en su opinión actuó como lo hizo porque solo quería el “bien” de Valladolid.
“Se ha ido muy feliz, paseando, al lado del mar, enviandonos fotos y rodeado de muy buenos amigos”, destacó. “Tenía muy buenos amigos y unos cuantos han estado con él. Se ha ido pronto, es lo único. Yo no veo otra manera de que se fuese. Porque le salían las cosas muy bien a mi padre siempre, eso es Karma”, concluyó, lo que recibió un sonoro aplauso.
Reconocimiento
El presidente de la Junta fue uno de los que destacó la figura del exalcalde, un “señor de la política”, un “caballero”, un hombre que en su opinión “tanto contribuyó desde su amor a Valladolid a que la democracia se instalara y se viviera en la ciudad”. También el secretario autonómico del PSOE también reivindicó su legado, que aseguró va a perdurar "siempre". “Nos enseño muchas cosas y vamos a tratar de estar a la altura de lo que nos enseñó”, afirmó.
Al igual, la delegada del Gobierno en Castilla y León reconoció su figura por ser un municipalista que apostó por la “conexión directa” con el ciudadano. El presidente de la Diputación y del PP de Valladolid remarcó su “amor al municipalismo” y su espíritu de consenso, diálogo y de concordia.
Finalmente, el exdirector de la Semana Internacional de Cine (Seminci) de Valladolid Fernando Lara aseguró que Rodríguez Bolaños constituirá siempre para él y para cuantos lo acompañaron en aquella etapa un "recuerdo imborrable". "Conviví con él muchos años por este motivo, y siempre sentí su respaldo, su cariño y su aliento, incluso en los momentos más difíciles. Su pérdida se me hace difícil de aceptar", confesó.
Por su parte la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha mostrado su "pesar y consternación" por la muerte de Tomás Rodríguez Bolaños y ha anunciado la concesión, a título póstumo, de la Llave de Oro del Municipalismo para el que fuera exregidor de Valladolid y presidente de la federación entre 1985 y 1991.
"Falleció un gran hombre, un gran Alcalde y un gran Presidente de la FEMP, que se ganó el afecto de todos los que le conocimos". Con estas palabras se ha referido Abel Caballero, actual presidente de la FEMP, a Rodríguez Bolaños que falleció ayer de manera repentina.
Tan pronto se conoció la noticia, Abel Caballero ha mostrado su pesar y "el recuerdo más emocionado en nombre de todos los Alcaldes y Alcaldesas de España". Al mismo tiempo, ha anunciado la propuesta de otorgar a Rodríguez Bolaños la Llave de Oro del Municipalismo, la máxima distinción de la FEMP, en reconocimiento a su "contribución significativa a la promoción y defensa del municipalismo", a título póstumo, señala la federación a través de un comunicado remitido a Europa Press.
Su muerte ha causado "conmoción" entre quienes le conocieron y trabajaron con él, tanto en su responsabilidad de alcalde como durante su trayectoria en la Presidencia de la FEMP o en el Congreso y el Senado, las Cámaras Legislativas en las que representó a Valladolid entre 1993 y 2008, señalan.
EN LA FEMP DESDE EL PRINCIPIO
Cuando el 14 de junio de 1981 se clausuraba en Torremolinos la I Asamblea General de la FEMP, el nombre de Tomás Rodríguez Bolaños, alcalde de Valladolid, ya aparecía entre los miembros del primer Consejo Federal (actual Consejo Territorial) de la organización recién constituida.
Municipalista convencido y defensor del asociacionismo municipal, Rodríguez Bolaños llegó a la Presidencia de la FEMP en 1985, elegido en la III Asamblea General, y reelegido en 1987, en la IV Asamblea. Permaneció en la Presidencia hasta 1991, continúa el comunicado.
Durante sus mandatos, tanto la Federación como la propia Administración Local vivieron momentos de "gran relevancia", como el arranque del desarrollo normativo de la Ley de Bases de Régimen Local a la aprobación de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales, en 1988.
La FEMP, durante esos años, también dejó su sede de la madrileña calle Covarrubias para instalarse en otro edificio, el actual, más céntrico y emblemático, de la Calle Nuncio, recuerda la FEMP.
También fue en ese periodo, en enero de 1990, cuando nació Carta Local, la revista y órgano de comunicación de la FEMP con sus asociados, el canal en cuyo primer editorial, titulado 'También somos Estado' Rodríguez Bolaños reivindicaba competencias y recursos para los Ayuntamientos, subrayaba el valor de su proximidad a los ciudadanos y reclamaba medidas para facilitar la gobernabilidad en los Consistorios, apuntan desde la federación.
En 1991, en la V Asamblea General, celebrada en Zaragoza, cedió el testigo al Alcalde de A Coruña, Francisco Vázquez, y, en su despedida del cargo, insistió en su demanda al señalar que los Gobiernos Locales "no pueden quedar fuera del Pacto Autonómico", concluye el comunicado.