Vecinos de la Calle Trafalgar, en Algeciras, reclaman su derecho al descanso

Algeciras

La Asociación Descanso Nocturno Centro Algeciras ha informado a los medios de comunicación que recientemente han mantenido una reunión con miembros del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Algeciras entre los que ase encontraba el propio alcalde, José Ignacio Landaluce,  para tratar diversos temas relacionados con el problema del ruido, suciedad y el descanso nocturno de los vecinos residentes en la calle Trafalgar, Plaza Sur de Europa y otras calles colindantes.

Los vecinos hicieron saber a los responsables municipales la gravedad de las molestias que ocasiona la existencia de esa zona de ocio nocturno señalando como principales problemas las aglomeraciones de personas en la calle donde el tono de voz de los clientes de estos establecimientos crece a medida que transcurre la noche llegando algunos a cantar y gritar en numerosos momentos de la noche. La respuesta del ayuntamiento no gustó a estos vecinos "eso es un problema que no se ha solucionado en ninguna ciudad de España y tampoco se va a solucionar ahora en Algeciras".

Se quejan también del problema que la música ocasiona a muchos vecinos de las zonas afectadas "que tienen que soportar música y vibraciones en sus propios dormitorios mientras intentan conciliar el sueño sin éxito debido a la insuficiente insonorización de la mayoría de los establecimientos". Esto ocasiona, según denuncia los vecinos, graves problemas de salud, insomnio, estrés, cansancio.ansiedad, aumento de la presión arterial y síntomas depresivos, entre otros.

Recientemente, en el mes de septiembre se le solicitó al ayuntamiento la declaración de Zona Aústicamente Saturada. Los vecinos además han reclamado al gobierno municipal una presencia policial permanente durante las noches de los fines de semana respondiendo el ayuntamiento con "un NO rotundo".

Por nuestro programa a ha pasado Miguel Ángel Cabot en representación de los vecinos, el abogado de la asociación de empresarios de la calle Trafalgar, Carlos Fenoy y el administrador de fincas Francisco Gil Rojas. Todos coincidían en la necesidad de colaborar para paliar en lo posible las molestias a los vecinos, "aunque si los clientes salen a la calle a fumar los establecimientos no pueden hacer nada".