Nuevo desfallecimiento final

Aranda de Duero

Negados a domicilio. El BlasGon y Bodegas Ceres cae frente a Torrelavega (28-23) y sigue demostrando que aún se le atragantan las fases definitorias de los encuentros lejos del Príncipe de Asturias.

El primer tiempo se resolvió con ventaja amarilla tras un ajustado 11-12. Un primer período en el que los amarillos entraron muy bien en partido. Marcaron las diferencias en el tramo inicial para marcharse en el marcador 1-4, transcurridos algo más de cinco minutos. Buena sintonía. Pero Torrelavega no iba a ser rival sencillo. Espabilaron los de Álex Mozas para llevar el partido a rentas mínimas, eso sí, con dominio del BlasGon y Bodegas Ceres. Así, se pasaría del 7-7 al 11-12 con el que se cerro el primer acto. Descanso.

Ya en la reanudación se mantuvo la buena tónica de dos escuadras que iban a vender cara su derrota. Los de Juan Moreno imprimieron ritmo al encuentro para dominar por tres goles (13-16) Capaces de los mejor, los amarillos siguen demostrando que también son capaces de lo peor. Lo hicieron. Del 13-16 se dejaron empatar al 17-17. Lo peor estaba por venir. Transcurría el minuto 50, el Villa de Aranda vencía por un gol (21-22) y se apagó la luz. En apenas dos minutos la escuadra arandina perdió el partido. Inexplicable. Torrelavega se puso 24-22 con un hombre menos. Parcial en superioridad de 3-0 y adiós a la posibilidad de seguir creciendo, de dar un golpe en la mesa y sumar la primera victoria a domicilio. Rota tanta esperanza el equipo se hundió, bajó los brazos para caer finalmente por cinco goles, incluidas dos exclusiones en la parte final. 28-23. Hay que hacer autocrítica.

Después de este nuevo varapalo, la próxima jornada, la décima de la competición, los amarillos actuarán como anfitriones con la visita de Agustinos al Príncipe de Asturias, que este domingo recibe a Antequera en el Pitiu Rochel.