Denuncian irregularidades en los contratos de los monitores de los 'udalekus' de Diputación
Las nóminas de los trabajadores muestran la falta de pago en domingos, festivos e indemnizaciones
Vitoria
El sindicato de LAB ha denunciado en las Juntas Generales de Álava las irregularidades supuestamente realizadas por la empresa Kulturbide en el convenio de ocio y tiempo libre que mantiene con la Diputación para la realización de los campamentos de verano. LAB se ha centrado, en concreto, en el caso de Eduardo Montejo, un monitor que trabajó este verano para dos campamentos en Granada y Cercedilla y que ha llegado a perder hasta 500 euros brutos.
Este verano, Eduardo Montejo trabajó realizando dos tandas de gaztebidaiak en Granada y Cercedilla. Se le realizó un contrato del 9 al 30 de julio, siendo este de 22 días solamente. Comunicó a su jefe que el contrato estaba mal hecho y que se tenía que revisar. Llamó a la empresa y se le proporcionó un número de WhatsApp, pero se le ignoró. Más tarde, llamó para hablar con la responsable, pero le dijeron que estaba de vacaciones y que no sabían cuándo iban a volver.
Finalmente, en septiembre, recibió su nómina por correo electrónico y comprobó que estaba mal hecha. Acudió al sindicato de LAB y le confirmaron que el contrato tenía que haber sido de 28 días y no de 22, teniendo 5 días de descanso.
Además, se pudo apreciar que en el contrato el sueldo base era ligeramente superior, pero no se les pagaba a los trabajadores los domingos, festivos e indemnizaciones. Incluso contaba con una cláusula de disponibilidad (10 euros aproximadamente por cada día trabajado).
"El dinero que se me debía eran 500 euros, que para una persona como yo que está en el paro es como una mensualidad de una hipoteca" explica Eduardo Montejo, trabajador afectado. Actualmente, Montejo se encuentra cobrando el paro, pero el 31 de octubre, Kulturbide le hizo un contrato de 4 días, paralizando su paro y afectando a sus gastos. "¿Si en esos cuatro días yo hubiera tenido un accidente? Supuestamente tenía un contrato" apunta Montejo.
Los sindicatos LAB y ELA han denunciado un caso cada uno, aunque LAB cuenta con más de diez casos de personas que trabajaron para distintos campamentos organizados por Kulturbide y que en sus nóminas existen también irregularidades. LAB comprobó esos sueldos con los de otros trabajadores que prestaron sus servicios para la empresa Ludoland y en esta última, todo estaba en orden.
Actualmente las nóminas de las personas afectadas se han denunciado ante la inspección de Trabajo.