Los turistas se quejan de los altos precios en Ibiza

Ibiza

Fomento de Turismo dice que la temporada turística que hemos dejado atrás ha sido similar a la de 2017 para los hoteleros y más irregular para la restauración y el comercio con un resultado ligeramente inferior a la pasada campaña.

Son los resultados de la encuesta que Fomento ha realizado entre sus socios y que se han presentado en la reunión del Comité Ejecutivo.

Se reconoce que la principal queja de los turistas son los precios de temporada alta porque no se ajustan dicen a la calidad del servicio que esperaban. Esto se intenta justificar por parte de los empresarios por la baja cualificación del personal, porque muchos trabajadores no han venido a Ibiza por los problemas de vivienda. Por esa razón piden la puesta en marcha de la Escuela de Hostelería.

Fomento habla de otros problemas. Dice que las playas no han estado listas para la temporada, con concesiones de hamacas que se han entregado tarde y que han faltado socorristas.

Y a la hora de hablar de factores que han afectado de forma negativa a los empresarios se sigue hablando de los pisos turísticos ilegales, la venta ambulante, la prostitución en zonas de ocio o las noticias alarmantes en medios internacionales sobre infraestructuras o seguridad.

Cautela

Los empresarios miran con cautela la próxima temporada. Reclaman más fomento del turismo familiar, pero recalcan que son especialmente sensibles a las variaciones de precio por lo que la ecotasa es un gran problema para este segmento del mercado.

También piden a las instituciones de Ibiza que se muestren firmen en la defensa de los intereses de la isla y lamenta que se tomen medidas normativas que restan competitividad frente a otros destinos del Mediterráneo. Asimismo reclaman soluciones a problemas que se han eternizado, como la limpieza, la falta de policías, las depuradoras, el intrusismo y el colapso administrativo. Ven necesaria la creación de un cuerpo de inspección único en el Consell de Ibiza para combatir ilegalidades como los alquileres turísticos, la venta ambulante o los taxis pirata.