La Subasta de Capones de Cascajares celebra su XIX edición a beneficio de la Fundación Aladina

Palencia

La Fundación Cascajares celebrará este lunes, 26 de noviembre, a las 20.30 horas, la XIX edición de la Subasta benéfica de Capones de Cascajares en el Salón Circular del Hotel Palace de Madrid (Plaza de las Cortes, 7), cuyos beneficios se destinarán íntegramente a la Fundación Aladina, que trabaja con niños que padecen cáncer.

En esta ocasión serán Samantha Vallejo-Nágera, Leo Harlem y Santiago Segura los presentadores del evento, que contará como viene siendo habitual, con la casa de subastas Sotheby's como coordinadora de todas las pujas de una subasta ya tradicional en fechas cercanas a la Navidad.

Está previsto que a esta XIX edición asistan representantes del mundo de la sociedad, la política y las finanzas, así como artistas y restauradores que colaborarán de manera desinteresada con sus donativos y aportaciones.

El dinero que se recaude en la subasta permitirá a la Fundación Aladina mantener sus programas y servicios de apoyo integral a niños y adolescentes que padecen cáncer. Desde hace 12 años, los programas de Aladina benefician, de diversas maneras, a más de 1.500 menores de toda España. En la actualidad, Aladina está presente en 12 hospitales de toda España. El año pasado la recaudación obtenida, más de 40.000 euros, permitió ampliar el equipo de psicooncólogas de la Fundación de cuatro a cinco profesionales. Este equipo atendió a 499 niños enfermos de cáncer, 43 padres y 18 hermanos durante el pasado año. El reto de esta XIX Subasta de Cascajares es poder recaudar el suficiente dinero para ampliar este equipo con un profesional más.

Por segundo año consecutivo los Capones de Cascajares estarán acompañados de tres grandes pavos. Todas las aves estarán expuestas en el Salón Circular durante las pujas. Los capones de Cascajares han sido criados en libertad en el Cerrato palentino, se han seleccionado por la calidad de su raza, de su carne y su plumaje y pueden llegar a pesar entre 5 y 7 kilos, además de que destacan por las coloridas plumas de sus colas.

Desde su creación en 1994 la empresa agroalimentaria Cascajares siempre apostó por líneas de colaboración con personas con algún tipo de discapacidad. Prueba de ello es la continua presencia de trabajadores con algún tipo de discapacidad en su plantilla, actualmente casi el 25% del personal del obrador, y la apuesta por proyectos de integración laboral para este colectivo. Fruto de esta inquietud surgió la creación de la Fundación Cascajares.