Filosofía para preparar el voto

Córdoba

La política siempre ha sido un tema de calado en el panorama filosófico. No en vano Aristóteles ya nos calificaba como “animales políticos”. Si algo nos distingue del resto de los seres vivos es la palabra. Pero la palabra unida a la dictadura de la imagen está siendo utilizada por algunos políticos para atacar directamente al lado emocional de los votantes.

En pleno siglo XXI la sociedad está sometida al imperio de lo emocional bajo el paraguas de lo inmediato. Y los mensajes políticos no se libran de este estigma. Algunos encuentran en la emoción del miedo, tal y como Maquiavelo defendía, un aliado para sus propósitos. Las consecuencias pasan por una pérdida de confianza en torno a la política que termina repercutiendo en el panorama social.

Desde el Lecho de Procusto, en el que se cocinan las encuestas y se ajustan los datos a los intereses partidistas, hasta el arte de aparentar, el pensamiento crítico tiene ahora, si cabe, más trabajo por hacer que nunca