Sobre la aprobación de los presupuestos

Santa Cruz de Tenerife
El pleno del Parlamento aprobó ayer los presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2019, unos presupuestos, considerados otro año más los más expansivos, los mejor dotados y los más sociales de la historia, y que suman 8.800 millones de euros, casi un siete por ciento por encima de los de 2018. Las cuentas recibieron el respaldo de Coalición Canaria, el Partido Popular y los socialistas de Casimiro Curbelo. Para la oposición de izquierdas - PSOE, Podemos y Nueva Canarias- se trata, faltaría más- de unos presupuestos insolidarios e insularistas que priorizan los intereses de los ricos y dan la espalda a los servicios públicos esenciales y a la lucha contra la pobreza y la desigualdad. Otro clásico preelectoral.
Lo realmente sorprendente es que acabando el último año previo a las elecciones, con la legislatura agotada y la oposición anunciando el fin del ciclo político del nacionalismo, y con tan sólo 18 diputados, el presidente Clavijo haya logrado hacerse aprobar por cuarta vez unos presupuestos que –al decir del portavoz nacionalista. José Miguel Ruano-, permitirán “afrontar cualquier escenario que se pueda producir, ahora que apunta una ralentización del crecimiento económico”.
Puede que sea así, pero eso no parecía ayer importarle una higa a sus ensimismadas señorías. Los discursos contrarios al Gobierno parecían más centrados en anunciar la buena nueva del ya mentado cambio irreversible del ciclo político que acabará para siempre con Coalición Canaria (otro clásico preelectoral), mientras los discursos de quienes apoyaron los presupuestos, se felicitaron unánimemente por la rebaja de impuestos, el reparto equilibrado de los cuartos entre las islas, el creciente gasto social y la oportunidad dada a la estabilidad, el progreso y el desarrollo.
Nada nuevo bajo el sol…




