Los hoteles de Benidorm y la Costa Blanca superarán el 90% de ocupación en fin de año

Alicante

Los hoteles de Benidorm y la Costa Blanca tendrán una ocupación de más del 90 por ciento en fin de año. Son las previsiones de la patronal HOSBEC, que además, confía en que algunos alojamientos cuelguen el cartel de completos la noche del 31 de diciembre.

Todavía quedan camas por vender, aseguran, y confían en las reservas de última hora del mercado de proximidad, sobre todo de la zona de Valencia, Albacete o Murcia, para llenar los hoteles esta Nochevieja.

El presidente de HOSBEC, Toni Mayor, declara que tendrán un buen fin de año y destaca que no solo Benidorm está bien sino que otros destinos cercanos como Altea, Calpe o Denia también tendrán buenos datos en estos últimos días de 2018.

Mayor reconoce que la reforma integral de algunos hoteles ha provocado que haya menos camas por ofrecer pero augura unos datos similares a los del año pasado. Destaca de nuevo la fidelidad del mercado británico pero también del nacional y del IMSERSO.

Toni Mayor califica 2018 como un buen año y comenta que la media anual de ocupación ha superado el 85%, unos datos muy positivos que muchos destinos quisieran tener, ha dicho. No ha sido tan bueno como 2017 pero se muestra satisfecho por la resistencia del turismo en esta zona.

Con la incógnita de lo que ocurrirá con el Brexit, Mayor declara que las reservas para el próximo verano e invierno seguirán la misma intensidad que en 2018. Además, reconoce que se está haciendo más promoción en otros mercados como el portugués o el francés por si el británico da muestras de flaqueza.

Por otra parte, en Alicante capital, también se espera que los hoteles de la zona centro estén al 100% de ocupación en Nochevieja. Ahora mismo, la cifra es de un 60% en los alojamientos que realizan cotillón y cenas organizadas.

"Al igual que en Benidorm, la reserva de última hora será clave para cumplir con esas previsiones. El resto de fechas navideñas son de una ocupación media", afirma Carlos Gomila, presidente de la Asociación Provincial de Hoteleros de Alicante (APHA).

Para APHA, 2018 ha sido un año para empezar a plantearse las cosas más en serio. Carlos Gomila declara que los hoteles de la capital han tenido un julio y un agosto en los que les ha tocado sufrir ya que en algunos momentos se ha tenido que reducir los precios para mantener las ocupaciones. "No ha sido un año malo, pero no crecer es siempre un estado de alerta y toca seguir trabajando" declara.