Las navidades que nos gustaría vivir

Palencia

Cuando ya se termina este año 2018, hemos vivido momentos duros y difíciles para las mujeres. A la cuestión mediática del asesinato de la Profesora en Huelva -que por cierto no computa como víctima de violencia de género porque no tenía, ni había tenido convivencia con el asesino- Cambiar la ley y las normas es una tarea urgente para este año próximo y empezar a computar todas las mujeres que son asesinadas por ser mujeres.

Bueno, decía que además de esta noticia en nuestra ciudad también hemos tenido lo nuestro: A una mujer árbitro en un partido de fútbol en Villamuriel, insultos machistas, dos jóvenes agredidos y con lesiones por defender de “posible acoso” a unas amigas y por si fuera poco un exhibicionista. Vaya manera de terminar el año

Pero yo hoy quiero hablar de algo más cercano, más cotidiano y que nos afecta a todas las mujeres. Me refiero a la cantidad de trabajo “extra” que tenemos en estas fechas. Nos pasa siempre que hay acontecimientos familiares y nosotras cargamos con la peor parte, pero en estas fechas es aún más grave porque tenemos que “hacer felices toda la familia” y esa tarea recae casi al completo en las mujeres. Somos las encargadas de pensar menús, de organizar y coordinar a toda la familia, compra, cocinar, recoger…

Estar pendientes de los gustos de cada cual, ser especialistas en casi todo sin sobrepasar el presupuesto y hacerlo con la mejor sonrisa.

¿Estas son las navidades que nos gustaría vivir?, pues no, sería mucho más divertido, entrañable y sobre todo justo e igualitario si los hombres se responsabilizan y repartimos las tares. No digo “echar una mano” y quizá recoger la mesa o poner el lavavajillas. Estoy hablando de responsabilidad.

Por eso me gustaría enviar este último mensaje de este año, de manera especial a los hombres. Pero no a los hombres cavernícolas, machistas que se nos pasan por la cabeza, es para los hombres que nos quieren, las personas con las que compartimos la vida, maridos, compañeros, padres, hijos, hermanos. Por favor haced un ejercicio de perder la comodidad y haced que todos los días sean de verdad las Navidades que nos gustaría vivir en igualdad a las mujeres.