¡Ni un paso atrás!
Antonia Asencio

Jerez de la Frontera
Creo en la necesidad de la alternancia política, en la libertad para votar a cualquier partido que esté legalizado y en la máxima de “una persona un voto”; esa es la grandeza y la simpleza de la democracia. No hay votos de primera o de segunda.
Dicho esto, ningún gobierno, por legítimo que sea, puede arremeter contra los derechos civiles conquistados por las personas; nadie puede cuestionar la necesidad de políticas de género que empodere a las mujeres y las proteja contra toda clase de violencia basada en una desigualdad estructural, que las cosifica y las reduce a la propiedad de alguien; que las limita por su simple condición biológica.
Las políticas de género atraviesan la totalidad de las políticas sociales; la política sanitaria, la de educación; las políticas de desarrollo económico; la política de vivienda…
Cuando pienso lo que hemos luchado para llegar hasta aquí y ahora, aun sabiendo todo lo que nos falta aún por hacer, no paro de oír voces que relativizan, minimizan y demonizan las políticas de género me echo a temblar.
En el parlamento Andaluz y de la mano de nuestro flamante Presidente hay quienes proponen derogar dichas políticas, cuando lo que hace falta es profundizar en el mayor desarrollo de las mismas; porque de ellas no sólo depende el bienestar de las mujeres, depende sobre todo el bienestar de la sociedad en su conjunto. Claro que también hay chalaos que pretenden demostrar a estas alturas que la tierra es plana; pues eso pobres e ignorantes chalaos; sólo que estos con poder, ahí está el peligro.




