El párroco de Santos Juanes agradece a la fundación Hortensia Herrero su ayuda para restaurar esta iglesia
La obras, que durarán cuatro años, están pagadas íntegramente por esta fundación y costarán seis millones de euros
Valencia
El párroco de la Iglesia de los Santos Juanes, Gonzalo Albero, agradece a la Fundación Hortensia Herrero la ayuda para restaurar uno de los templos más emblemáticos de Valencia y resolver los problemas estructurales que presenta.
La obra tendrá un coste de seis millones de euros, que financiará íntegramente la entidad, y dará comienzo en el último trimestre del año 2020 con vista a finalice cuatro años después, aunque en breve se iniciaran los estudios previos. Además, también está prevista una actuación en la bóveda en los frescos de Antonio Palomino, por lo que Albero cree que a nivel cultural y patrimonial es una posibilidad única de contemplar en todo su esplendor la obra del pintor español.
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Albero explica, además, que esas actuaciones no interferirán en el día a día de la parroquia y la iglesia seguirá abierta durante todo este tiempo. La intervención correrá a cargo del mismo equipo que trabajó en la Iglesia de San Nicolás, dirigido por Pilar Roig y Carlos Campos. Mientras Campos se encarga de la intervención arquitectónica, Roig llevará a cabo la restauración de los frescos de Palomino. Un proyecto que como explica el párroco, empezó el padre de la catedrática.
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Unos frescos que los expertos consideran incluso de mayor valor artístico que los de San Nicolás pero que no se pueden contemplar en su conjunto porque las pinturas se han restaurado por tramos, con el agravante de que una de las restauraciones, la chapuzera intervención que realizó el taller de los Gudiol, arrancó la pintura para colocarla sobre bastidores. Esto provocó muchos más daños en la obra, y acabó desapareciendo.