Sociedad
Justicia

"Mi ideología la cuelgo en la percha cuando me pongo la toga"

El titular del Juzgado de lo Social, número 3 de Córdoba, Antonio Jesús Rodríguez, ve necesario "que las leyes creen un cordón sanitario, para que ningún juez tenga la duda de que dependiendo de la decisión que tome, su carrera profesional se pueda ver elevada o perjudicada"

El juez de lo social 3 de Córdoba, Antonio Jesús Rodríguez / Cadena SER

Córdoba

En un momento en el la Justicia está muy cuestionada, conocemos al juez de lo social número 3 de Córdoba, Antonio Jesús Rodríguez Castilla. Runner, twittero, aficionado taurino y miembro de Foro Independiente Judicial, hablamos con él de la saturación de los juzgados de lo social,  de la percepción de la justicia, de la independiencia judicial, y de las reivindicaciones que hacen al Gobierno.

Entrevista a Antonio Jesús Rodríguez, magistrado de lo social número 3 de Córdoba

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¿De qué se encargan ustedes, qué tratan en el juzgado?

Lo primero que quiero decir es que tienen jurisdicción en toda la provincia, no solo en el partido judicial de Córdoba. Y los Juzgados Social básicamente se encargan de tres tipos de conflictos: resolver los conflictos entre empresarios y trabajadores, las relaciones laborales de los trabajadores y los conflictos que puedan tener materia de reclamación salarial, en materia de vacaciones, de permisos.

Por otro lado nos encargamos de conocer todo el ámbito prestacional de la Seguridad Social, hablamos de incapacidades, de bajas por enfermedad, de desempleo y tenemos un último reducto menos conocido que es el control de la labor inspectora por parte de la administración, a todas las empresas en el ámbito del Derecho del Trabajo y la Protección Social.

En Córdoba con lo que hemos pasado y lo que estamos pasando todavía, será bastante numeroso el trabajo que tienen y muchos pendientes de resolver. ¿Nos puede ofrecer alguna estadística, alguna comparativa?

Pues sí. Desgraciadamente desde el año 2008 algo que parecía coyuntural como una crisis económica, se ha convertido en estructural. Te doy un dato para que los oyentes puedan entenderlo.

El Juzgado de lo Social, según el Consejo General del Poder Judicial, puede recibir 800 demandas al año. Nosotros llevamos recibiendo durante dos últimos años una media de 1200 demandas al año por cada juzgado. Esto supone que en los Juzgados de lo Social Córdoba la carga de trabajo determinaría que en lugar de los cuatro juzgados que hay, serían necesarios 6, dos más.

Sin embargo, la falta de recursos económicos, la falta de medios, ha hecho que está necesidades no hayan podido ser atendidas. Tuvimos durante un tiempo una compañera de refuerzo, que ahora no presta servicio en esta jurisdicción

Pero ese es el dato: recibimos 400 asuntos más al año, de lo que está previsto para un funcionamiento ordinario, normalizado y sin retrasos, y sin esperas, que al final siempre lo mismo. La Justicia lenta, tardía; la Justicia con retraso, o es menos justicia, o no es Justicia.

Eso le quería preguntar, ¿cómo lo resuelven?, y ¿a qué fecha resuelven, a qué fecha están fijando plazos a estas alturas del año?

Pues no estamos cumpliendo los plazos, es imposible con esta carga de trabajo, y no estamos cumpliendo los plazos. Sin embargo, el esfuerzo de las compañeras y los compañeros de la jurisdicción social de Córdoba, está haciendo que el retraso sea menor que en otras ciudades con la misma situación que Córdoba.

Ciudades como Sevilla o como Málaga, que reciben una carga de trabajo similar a la de Córdoba, están resolviendo asuntos a 2 y 3 años. Nosotros ya estamos retrasados pero estamos consiguiendo, hasta ahora, que el retraso no sea mayor de un año. Y en aquellos asuntos urgentes, estamos consiguiendo resolver en tres cuatro meses.

Para nosotros es un éxito y sabemos que no es suficiente, pero todo es gracias al sobreesfuerzo de compañeras y compañeros, jueces magistrados de toda la administración de justicia, funcionarios, que están en los cuatro Juzgados de lo Social de Córdoba, y que hacen un esfuerzo, porque sabemos que el hecho de que una persona deje de cobrar un salario, una pensión, que es un medio de vida para él, es fundamental, y hacemos todo el esfuerzo por evitar el menor retraso posible.

Pero ustedes también son personas y trabajadores, y supongo que cada día pensarán ¿hasta cuándo vamos a poder aguantar, o hasta dónde vamos a tener que llegar?

Ese es el compromiso que los magistrados y magistradas de Córdoba tenemos. Esta es una profesión muy vocacional y hemos renunciado a una parte de nuestra vida personal y familiar por intentar ser eficientes y, de alguna forma, y me imagino que luego hablaremos de ello, eso es lo que se premió en los Jugados de lo Social de Córdoba en el año 2018, porque entendimos que tenemos que buscar fórmulas donde no llegaba la ley, donde no lo permitía la ley, para buscar una mayor eficiencia, para buscar una mayor celeridad, para buscar una mayor cercanía con la ciudadanía, y para intentar resolver esos problemas, que ya digo, que crean otros.

De los cuadros social de Córdoba se ha producido una auténtica “desbandada”, porque antes esa sobrecarga de trabajo, todo el mundo tiene derecho a buscar un mejor destino, donde pueda vivir, pero claro, mejor. A nosotros no nos pagan más por tener más trabajo, nos pagan lo mismo.

Se refería usted al premio que recibieron el año pasado, un premio que otorgó el Consejo General del Poder Judicial, el Premio Calidad de la Justicia en la modalidad de "Justicia más accesible", por su proyecto "Sistema de acumulación de procesos en los Juzgados de lo Social de Córdoba. Años 2007 a 2016"... ¿Qué hicieron?

Esto es algo que yo me encontré cuando entre en Córdoba, es una decisión que habían adoptado los compañeros y a la que yo me sumé. Básicamente parte de la realidad de los Juzgado de lo Social.

Cuando en una empresa hay un problema con los trabajadores, el problema muy repetido. Imagínate una empresa que tiene 10-15 trabajadores, si tienen el mismo problema, los trabajadores van a plantear la misma reclamación...hay dos posibilidades: que esas 15 o 20 reclamaciones se vean de manera separada, o que se vean de manera acumulada.

La ley no habilita un sistema claro para tener conocimiento de cuántas reclamaciones repetidas, porque era el mismo fundamento, la misma pretensión, la misma reclamación habían caído en un jugado. Nosotros en los juzgados de lo social de Córdoba, ideamos un sistema para conocer cuántas demandas se recibían de una manera repetida, similar, y se podían acumular para tramitarlas, enjuiciarlas y resolver en un solo procedimiento.

Esto tiene una un perjuicio: hace más difícil la tramitación del asunto, pero dos ventajas básicas, primero: hay un solo funcionario, un solo juzgado, conociendo del asunto, con lo que hay mayor seguridad jurídica, va a haber una sola respuesta, y no va a haber 15 o 20 respuestas; y en segundo lugar, al tener menos asuntos en tramitación, el señalamiento se podía recortar.

Y por eso es la diferencia en tiempo de respuesta que hemos conseguido o que habíamos conseguido frente a otros juzgados que con la misma problemática no habían adoptado este sistema.

Ojo que esto nos penaliza, porque la administración, y esto es algo que los que estamos la administración entendemos: ser eficientes se penaliza. Como no tenemos retraso la administración entiende que no necesitamos refuerzos, que no necesitamos ayuda, porque frente a otros juzgados, que tienen más retraso, a los que hay que ayudar es a los que tienen más retraso. Nosotros recibimos la misma cantidad de trabajo o más que otros juzgados que tiene más retraso, pero bueno, fue una decisión personal de los compañeros y las compañeras que estaban en ese momento trabajando, yo creo que fue acertada, y así lo reconoció el Consejo General del Poder Judicial.

Hay dos asuntos sobre los que nos gustaría volver:“La desbandada”de personal de los Juzgados de lo Social, el porcentaje de personas que se han ido por esta situación de colapso, y por otro lado, si les consideran eficientes y no les ponen refuerzos, ¿cuál va a ser la solución?

En esta semana yo pierdo 4 funcionarios, de un total de 9 funcionarios .Digo pierdo, porque una asciende, dos han pedido la comisión de servicio, y llega un nuevo titular.

En verano la compañera de tramitación de Justicia se jubiló de forma anticipada, los compañeros magistrados y magistradas que se han pedido otro destino en Córdoba en el último año han sido cinco o seis.

Esto demuestra que claro es una acción personal y totalmente defendible, si tú ya estás en un destino donde el trabajo te afecta, cómo están mis funcionarios, hasta las cinco o las seis de la tarde, que no se les pagan las horas extras, que la asumen por compromiso, por responsabilidad, nadie le obliga a ello. Y sin embargo tienes un juzgado, u otro destino donde le permite trabajar con el mismo sueldo y poder salir en su horario ordinario, pues es lógico y es comprensible, respetable e incluso aplaudible, que busquen un destino donde puedan desarrollar su actividad, con más calidad y con más tranquilidad. Es que la tranquilidad es algo básico la administración de justicia. Hay que ver los problemas y resolverlos con tranquilidad no puede haber prisa.

Esa realidad es así, y la temporalidad en la administración también es un perjuicio porque lógicamente el conocer de los asuntos, el conocer de la jurisdicción, el tener experiencia es un algo muy positivo, algo que te da capacidad de resolución y capacidades de afrontar los problemas con mayor celeridad.

Y por otro lado, ¿qué hacer?, pues ese es el gran problema, cualquier solución va a partir de la responsabilidad, no vamos a convertirnos en funcionarios o empleados públicos irresponsables. Queremos que nos escuchen. Sabemos que existen otras necesidades en Córdoba y en toda la administración de justicia andaluza, sabemos que no somos los únicos; nosotros lógicamente tenemos una visión parcial de problema, pero confiamos y así el presidente de la Audiencia y el Presidente del TSJA lo han entendido, que al menos es necesario un juzgado más de lo social en Córdoba, y confiamos que sea este año en el que se consiga, sino, lo vamos a seguir intentando reclamamos.

¿Van a ustedes a salir a la calle de nuevo a manifestarse, o mejor dicho a concentrarse? Les hemos visto durante el año pasado, concentrarse a las puertas de la Ciudad de la Justicia…

Es una decisión muy complicada incluso dentro la carrera es muy discutida, hasta qué punto tenemos el derecho de huelga, que ya parece que por fin está reconocido, como cualquier otro profesional, como cualquier otro empleado, y si una medida de presión como la manifestación es la más idónea.

Precisamente hoy ( miércoles 23 de enero)  marcho para Madrid, yo formó parte de Foro Independiente Judicial en su dirección nacional y tenemos hoy una reunión de las 4 asociaciones judiciales a nivel nacional y de las asociaciones de fiscales para decidir hacia dónde vamos.

Tenemos claro que nuestras reivindicaciones no se han atendido, y de verdad somos prudentes en nuestras reivindicaciones, no pedimos la luna, sabemos que estamos en un momento convulso, la recuperación económica no ha sido la esperada, existe una debilidad parlamentaria que hace que los acuerdos y los consensos sean más difíciles, pero es que hay datos que no podemos seguir admitiendo como representantes del colectivo.

Yo pongo algunos datos que creo que el ciudadano lo puede entender:

Un juez o un fiscal de guardia en una guardia de un pueblo cobra 79 céntimos por hora, en funciones de guardia, no llega a 1 € lo que cobra un juez o un fiscal en funciones de guardia.

Otro ejemplo: nosotros tenemos un reglamento por el cual si tenemos que sustituir un compañero que está de baja, de permiso, que se ha ido a un curso de formación…la sustitución no se retribuye hasta el décimo día, los primeros 9 días asumimos nuestro trabajo y el trabajo del otro compañero o compañera gratis, estamos trabajando el doble. Nosotros pedimos que si yo asumo el trabajo de otro compañero, si yo echo horas extras, retribúyamelas.

Otro ejemplo: hace poco leí que los médicos se quejaban porque tenía 6 minutos para atender una consulta en Atención Primaria y pedían el doble, 12 minutos.

Recientemente el Consejo General del Poder Judicial ha fijado un reglamento donde, entre otras cosas dice, que una orden de protección, una medida de protección a una víctima de violencia de género, la tienen que resolver el juez en 45 minutos.

45 minutos es el tiempo que tú tienes que invertir, para oír a la víctima, oír al investigado ,convocar la comparecencia y resolver. Pues habrá asuntos que quizás necesiten ese tiempo, pero habrá asuntos que requieran mucho más tiempo, y lo que no podemos es hacer es condicionar la calidad de la justicia a un régimen de trabajo a tiempo, toda la actividad intelectivas no puede estar sometidas a tiempo, necesitan el tiempo suficiente.

Explique usted, Consejo General del Poder Judicial, a una víctima de violencia de género, que su asunto, sea cual sea, se va a resolver en 45 minutos. Inexplicable, ¿no?, pues ese tipo de asuntos son los que nosotros discutimos, nos oponemos y pedimos que se resuelvan para una mejor, o mayor calidad de la Justicia.

No estamos pidiendo subida de sueldos salariales lineales, que también tenemos derecho. Perdimos el poder adquisitivo en el año 2010, más que el resto de la función pública y nosotros no lo hemos recuperado; pedimos mejoras para prestar un mejor servicio.

Hay mucha polémica siempre con la independencia judicial. Ustedes ¿se ven libres para realizar su trabajo, para trabajar en el día a día?

Yo jamás he recibido una llamada, una presión o un comentario de nadie, sobre cómo tengo que tomar la decisión, pero yo soy consciente que yo estoy en destino de provincias y lo que yo quiero, que las leyes creen un cordón sanitario, para que ningún juez tenga la duda de que dependiendo de una de que tome una decisión u otra, su carrera profesional se va a ver perjudicada.

No es un problema que te llamen, es su problema de que si yo decido una cosa u otra puedo verme beneficiado o perjudicado, porque los órganos de gobierno del Poder Judicial, y la decisión última está en los partidos políticos, ojo, no en el Parlamento, está en el partido político, y esta es la verdadera corrupción del sistema. Se va a conocer mi decisión y me van a decir que estás ya con un juez conservador o de un juez progresista y no se va a valorar mi calidad, el mérito, la capacidad, sino que se va a hablar valorar mi tendencia ideológica.

El problema no es que te llamen, el problema es poner en los lugares de mayor interés profesional a compañeros predecibles, o entender que los compañeros pueden dejarse llevar por su ideología para tomar una decisión. Nunca, ningún juez, ningún magistrado, ningún fiscal puede tomar una decisión por su ideología, que lógicamente todos la tenemos.

Los magistrados tenemos ideología pero como yo siempre digo, mi ideología la cuelgo en la percha cuando descuelgo la toga y me la pongo.

Con todos estos elementos, ¿se puede ofrecer una justicia de calidad?

Sí, y desde mi asociación, desde Foro Independiente Judicial, así lo entendemos.

Estamos dispuestos a renunciar a nuestra carrera profesional si en ello nos va a perder nuestra independencia judicial. Y la gran mayoría, por no decir la totalidad de la carrera judicial, así lo entiende.

Hablaba en un momento determinado un conocido jurista de mancharse la toga con el polvo del camino, otros compañeros hablan de garbanzo negro; que puede haberlo en cualquier profesión, puede haberlos pero: tiene que haber mecanismos, resortes de control para que esa persona, mal profesional, no abuse de su falta de profesionalidad, sino que haya elementos suficientes para que el daño sea el menor, que haya respuestas ante esos errores, ante esas irregularidades o fraude, pero hasta ahí llegamos.

Y el compromiso: estamos dispuestos a renunciar a nuestra carrera profesional si en ello nos va nuestra independencia judicial.

En cuando a la percepción que tiene la ciudadanía sobre la Justicia. Lo hemos visto hace poco con la sentencia de La Manada. Hay una sensación de una justicia bastante poco justa, bastante alejada de su realidad, bastante sectárea y bastante lenta, ¿qué sensación tienen ustedes cuando les ven así?

Pues que nos ven así y que tenemos un problema de comunicación, efectivamente.

Hay una imagen de lentitud, que es cierta. No nos consideramos responsables, nos consideramos también víctimas de ese problema.

Hay una imagen de sectarismo, precisamente provocado por esa politización de la justicia, por esa participación de los partidos políticos en el sistema de elección de los vocales judiciales del Consejo del Poder Judicial, que al final son los que eligen, al presidente de la Audiencia, al Presidente del Tribunal Superior de Justicia, magistrados del Tribunal Supremo…

Tenemos un problema de imagen y es curioso todas las estadísticas dicen que aquellos ciudadano que se ha acercado a la justicia tiene una mejor concepción de la justicia que aquellos que nunca en contacto con ella.

Sabemos que España es un país muy cainita, pero tenemos que hacer un esfuerzo en comunicarnos mejor.

Existen mecanismos de comunicación, gabinetes de comunicación, en el Tribunal Superior de Justicia y en el Consejo General del Poder Judicial que no están haciendo bien, desde nuestro punto de vista, el trabajo de transmitir la imagen real de la justicia para ello estamos supliendo esas deficiencias.

Estamos metidos en redes sociales, estamos haciendo una labor de divulgación, de explicación, e incluso los jueces a nivel particular, estamos haciendo es esfuerzo y sometiéndonos al debate público en las propias redes sociales. Yo por ejemplo soy uno de los muchos jueces que tengo Twitter. Y estoy todo el día intentando explicar la razón de las cosas, para bien y para mal, pero hay que estar explicando la realidad de las cosas, e intentando dar opinión.

Yo tengo que decir que en Twitter no he bloqueado todavía nadie o sea que, frente a otros compañeros, yo tengo una muy buena experiencia de las redes sociales. Nadie hasta ahora, y llevo ya más de tres años, me ha increpado, me ha ofendido, o me ha faltado el respeto, todo lo contrario: cuando explicas bien las cosas hay mucha gente que agradece las explicaciones. Quizás eso no falta mejorar la comunicación.

Díganos su dirección en Twitter...

@antoniojrod72

María Eugenia Vílchez

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Me mueven las causas justas. Me gusta contar historias y dar voz a personas que normalmente no la tienen...

 
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