El Gobierno anuncia un impulso al Parador de Molina y en la zona creen que es "otra promesa electoral"
Desde el colectivo vecinal La Otra Guadalajara aseguran que las obras llevan 2 años prácticamente paradas
Guadalajara
Como el Ave Fénix, el proyecto del Parador Nacional de Turismo de Molina de Aragón resurge cada vez que se acerca una convocatoria electoral.
La secretaria de Estado de Turismo, Isabel Oliver, afirmaba este martes en la Comisión de Industria que durante este año van a terminar las obras de los paradores de Muxía y de Veruela y que "se va a dar un fuerte impulso a los de Ibiza y Molina de Aragón".
Ángel Luis López, situación Parador Turismo Molina de Aragón
10:24
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1548845709_445940/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Estas declaraciones no han despertado demasiada expectación en la comarca, donde son ya muy escépticos con este proyecto. Ángel Luis López, portavoz del colectivo vecinal La Otra Guadalajara, asegura que las obras llevan casi dos años paradas. "De vez en cuando se ve a algunos obreros por allí, pero apenas avanzan y solo hablan de ello cuando se acercan las elecciones".
El calendario da la razón a estos vecinos. El parador fue prometido en 2006 por José Luis Rodríguez Zapatero como compensación tras el incendio del Ducado. En 2011, poco antes de las elecciones, se puso la primera piedra, pero no se hizo nada más. En 2015, dos meses antes de las municipales y autonómicas, se trasladó allí la primera máquina y empezaron las obras, que desde entonces no han avanzado al ritmo deseado. Este año hay elecciones y, de nuevo, se habla de impulso a las obras.
"Han pasado muchos años y, si hubiera habido voluntad real, las obras estarían hechas", destaca López. "Todos han venido a hacerse la foto y luego nada. Tanto que ahora ya ni vienen porque saben que al final se les vuelve en su contra".
Y, al margen de las promesas y los plazos incumplidos, desde La Otra Guadalajara recuerdan que el proyecto que se está ejecutando no es, ni mucho menos, el prometido en un principio. De un parador de 82 habitaciones con spa y piscina cubierta se fue recortando hasta uno de 22 habitaciones sin piscina ni spa. "A nosotros nos cuesta llamarlo Parador. Creemos que es imposible que sea viable porque con 22 habitaciones no da ni para albergar una convención. Todavía están a tiempo de cambiarlo y hacer un Parador de verdad".