Las pocas identificaciones de excrementos caninos obligan al Ayuntamiento a cambiar de empresa

Málaga

Cuando se cumple un año de la puesta en marcha del sistema del ADN canino para combatir los excrementos en la ciudad, el ayuntamiento de Málaga anuncia que cambiará de empresa porque apenas se consigue identificar el ADN en la mitad de las defecaciones recogidas en la calle.

El balance del primer ejercicio de funcionamiento de la normativa para multar a los propietarios de perros que no recogen los excrementos de sus mascotas indica que se han tomado desde el pasado 1 de enero de 2018 un total de 384 muestras de defecaciones de canes en la vía pública.

De esa cantidad, sólo se ha conseguido extraer el ADN en 172 casos, algo menos del 45 por ciento del total, según datos del área de Medio Ambiente. Y de ellos, sólo se ha podido multar a 57 propietarios, que son aquellos que habían registrado a sus mascotas en el censo de ADN municipal, como obliga la normativa. Como conclusión, entre aquellos casos en los resulta imposible extraer el perfil genético y  aquellos otros en los que no se identifica al animal que hizo la deposición porque no está registrado en el censo canino, sólo se consigue dar con a un 15 por ciento de los animales del total de los excrementos recogidos.

La situación ha provocado que el ayuntamiento decida cambiar de empresa (el contrato acaba de terminar) y esté elaborando uno nuevo para adjudicar de forma directa con un contrato menor el servicio de recogida de excrementos e identificación a la empresa ADN canino, que trabaja con laboratorios alemanes.

La nueva sociedad ha garantizado preservar las muestras 6 meses y conseguir extraer el ADN en un 80 por ciento de los casos.

La normativa cumple un año con el cambio de empresa y también con la intención del áera de Medio Ambiente de duplicar o triplicar la recogida semanal de muestras, que hasta ahora se hacía una vez cada siete días.

En febrero se cristalizará el nuevo contrato.

El registro municipal de ADN recoge ahora 29.390 mil perros y las multas por no censarlos ascienden a 554.