Se acabó la pesca recreativa con la ampliación de la protección en Cabrera
Unas 200 embarcaciones se ven afectadas por la nueva superficie de 90.000 hectáreas
Palma
Se acabó la pesca recreativa tras la ampliación de la protección en Cabrera. Unas 200 embarcaciones se ven afectadas por la nueva superficie de 90.000 hectáreas que prohíbe cualquier tipo de pesca de recreo en todo el entorno del Parque Nacional. Las diferentes asociaciones náuticas prevén formar una plataforma en defensa de esta actividad y no descartan llevar a cabo movilizaciones para exigir que se permita este tipo de deporte.
Mientras que las entidades ecologistas celebran que Cabrera haya pasado de tener 10.000 a 90.000 hectáreas y convertirse en el parque marítimo-terrestre más grande del Mediterráneo, desde la Asociación Mallorquina de Pesca Recreativa Responsable, su presidente, Bernardí Alba, critican la falta de consenso y las prisas de esta protección. Alba explica que la ley de parques nacionales, con más de un siglo de vida, se aprobó cuando no había territorios marítimos protegidos.
Desde esta asociación lamentan que hasta 200 embarcaciones acuden para realizar la pesca deportiva en un fin de semana. Dice Alba que al prohibir esta actividad se está quitando la alegría de quienes la practican.
Además, estas entidades cuestionan la vigilancia tras haber multiplicado por nueve la superficie del parque nacional.