3 restaurantes para enamorarte de la calle Galera
A Coruña
Hubo un tiempo en A Coruña en que el centro estaba repleto de gente. Si un sábado pensabas dónde quedar para cenar no se te pasaba otro lugar por la cabeza que no fueran las calles de la Estrella, Olmos, Galera y Barrera. También es cierto, que todas tuvieron su momento de bajón. Puede que fuese la irrupción de nuevos barrios, como Matogrande, que se volvió una alternativa para muchos, o el hecho de que ahora los bares se cuidan más y es sencillo encontrar locales chulos en otras zonas. Prueba de ello es, por ejemplo, el entorno de la Fábrica de Tabacos, con las cafeterías siempre a tope.
Pues de un tiempo a esta parte parece que el ambiente en el centro resurge, primero fue en la Barrera (creo que el tuvo mucho que ver el Concepto Negra de la familia Canosa) y la magia se extendió hasta la Estrella. Pero hoy yo me voy a centrar en La Galera ¿Por qué? Porque tiene tres restaurantes muy chulos que quiero recomendaros. ¿Os animáis a conocerlos?
A Taberna da Galera (Galera, 32)
El primero que conocí y el más indicado para una cena de amigos. A Taberna da Galera es un restaurante que cumple las tres “b”, bueno, bonito y barato. La carta, variada, tenéis un poquito de todo: carnes, productos del mar, sabores clásicos como sus mejillones al vapor y más modernos como ceviche y tartar. ¿Mi recomendación? Sin lugar a dudas, si vais a A taberna da Galera tenéis que pedir sus tomates con guacamole (hay ración y versión tapa). Cuando fui la primera vez y mi amiga se empeñó en decir que teníamos que pedirlos admito que dudé, me gusta mucho el tomate pero de ahí a que sea uno de los platos elegidos para comer en un restaurante… ¡Hasta que lo probé! ¡Qué pasada! No sé describiros el sabor, pero gustará a todos, os lo aseguro. Más tarde descubrimos que el secreto de este plato es que se elabora al horno durante horas, y durante ese tiempo el cocinero va añadiendo una salsa periódicamente mientras se asa. El resultado es espectacular.
Y si queréis más recomendaciones, el fish and chipsno está nada mal. Un plato que nunca me había gustado (no entiendo que pueda ser la comida típica de Londres) pero que aquí es otra cosa. Pescado rebozado de calidad (no recuerdo cual, creo que merluza) y patatas fritas como deben ser, no enchoupadas en aceite. Un plato ideal para los peques (y no tan peques) a los que no guste el pescado.
Taberna A Carballeira (Galera, 10)
Y de taberna en taberna, aunque en este caso de taberta tiene poco. A Carballeira es un local íntimo y chiquitito situado casi enfrente de La Bombilla.Su nombre se debe a que el interior imita a una carballeira y comes bajo las ramas (falsas) de un roble. Precisamente destaco lo de íntimo y pequeño porque igual no es el mejor lugar para quedar con un grupo grande. Al fondo sí hay unas tres mesas tamaño estándar pero en general son todas pequeñas, de dos personas pegadas a la pared. Lo mejor de este local es el concepto: los pinchos, imitando el estilo vasco.
Existe un expositor donde tienes todas las tapas preparadas y eliges la que prefieres. Es ideal para los que (como yo) coméis con los ojos. Todas tienen un aspecto espectacular y el sabor no defrauda, al menos las que yo he probado. Además, ya hace que no voy, pero recuerdo que el trato de los camareros fue especialmente bueno. Muy majos, algo que me encanta cuando voy a un local de hostelería. Tal vez este puede ser un buen restaurante para que los que celebréis San Valentín llevéis a vuestra pareja a tomar unas tapas. ¿No dicen que los jueves son los nuevos viernes?
Vino Premier (Galera, 40)
Este es mi último descubrimiento. A pesar de que lleva años abierto lo conocí hace solo unos días y admito que me ha venido de perlas para coronar esta post que ya llevaba meses rondándome en la cabeza. Vino Premier, como su nombre indica, es una vinatería, así que es una recomendación ideal para los que adoráis el mundo del vino. En realidad, inicialmente el proyecto era online con una tienda gourmet que empezó a tener locales físicos en Madrid y México. Ahora también tiene un espacio en A Coruña con este restaurante.
Pues bien, aunque su especialidad sean los vinos, a mí la comida me encantó. En la carta hay desde las clásicas tablas de embutidos hasta tostas, baos y tacos. Es más estilo picoteo que raciones aunque también hay unos cuantos platos principales. Nosotros pedimos unas gyozas, que estaban sabrosísimas, un tomate japonés (sí, otro tomate) y una tosta de solomillo ibérico con queso de cabra que puede que sea lo único que no repita. Ojo, no porque no estuviera sabroso, si no porque tomar filetitos en una tosta no es lo más cómodo del mundo. Calidad precio, muy recomendable y, de nuevo, los camareros, fantásticos. Otra buena opción para brindar con vuestra pareja (o con quien os dé la real gana) esta semana.
Me da pena no poder incluir en esta reseña el restaurante Peculiar (Galera, 24) del cocinero Álvaro Victoriano, pero no he tenido oportunidad de hacer reserva. Si vosotros ya lo habéis probado, por favor, contadme si vale la pena.
¿Y el resto de locales los conocíais? Está claro que solo son tres ejemplos de los maravillosos restaurantes que tenemos en A Coruña. ¿Cuáles son vuestros favoritos? ¿Os gustaría que repitiese este post con otras calles de la ciudad? Pues dejádmelo en comentarios y aportar ideas, porfa.
Nos vemos en unas semanitas, marineros.