La Asociación de Empresas Turísticas recomienda impulsar estrategias para que no se resienta la rentabilidad del sector

Elche

El segundo mes del año se ha saldado con una mejora de ocupación en los establecimientos hoteleros de Elche respecto a febrero de 2018. Así, la cifra de 2019 ha alcanzado un valor del 66,6 %, dos puntos por encima del dato de ocupación de febrero del año pasado.

Este buen dato, sin embargo, se contrapone al indicador del precio medio de gasto que bajó y se ha situado en 52 euros frente a los 54 euros de hace un año.

La combinación de ambos indicadores describe un escenario en el que, a pesar de la presencia de un mayor número de turistas ocupando las habitaciones, la rentabilidad del sector hotelero de Elche se resiente.

El contexto nacional, con datos estadísticos de enero del INE, refleja incrementos en la ocupación de un 0,44 %, pero acompañados de un alza del indicador de gasto 1,25 % interanual. Este incremento es mayos para el conjunto de la Comunitat Valenciana, que llega al 7,13 %.

Entre los factores que han contribuido a animar la ocupación en febrero, hay que destacar la celebración del Simposio de Enfermedades Autoinmunes Sistémicas, que se celebró en el Centro de Congresos de Elche los días 22 y 23.

La asociación de empresas turísticas de Elche ha valorado estos datos con matices. Explican que mantener la competitividad del destino a costa de sacrificar rentabilidad puede contribuir a mantener la posición en el mercado o el empleo turístico en el corto plazo, pero cronificar esta estrategia supone un riesgo que impide generar recursos suficientes para reinvertir y devalúa la propia imagen de la ciudad frente a la demanda.

Para la asociación resulta urgente acometer acciones de promoción en mercados tradicionales y también apostar por una diversificación dirigida a aportar nuevos flujos especializados.

Instan, además, a impulsar una mejora continua de infraestructuras y servicios turísticos que cualifiquen Elche para la mejora de la experiencia turística y ponen como ejemplo nuevos segmentos, sostenibilidad, inclusión y la mirada puesta en construir un destino turístico inteligente que para los representantes del sector hostelero deben formar parte de la hoja de ruta turística de la ciudad.