Dimite el coordinador de IU, Ramón Arguelles
Desea que quien le suceda consiga "la unidad que yo no he logrado", dice
Ramón Arguelles deja su cargo como coordinador de Izquierda Unida de Asturias, tras salir derrotado frente a Ángela Vallina en las primarias para encabezar la candidatura autonómica de la organización. Renuncia a la primera línea política, volverá a su actividad profesional y desea a quien le suceda que logre lo que él no pudo conseguir: una organización que consiga integrar a todas las sensibilidades, dentro de la pluralidad.
Era un desenlace previsible, pero Ramón Arguelles ha comunicado ya su decisión al coordinador estatal, Alberto Garzón, antes de hacerla pública. Afirma que "no es una espantada, es un paso atrás para que lo que yo no he conseguido, lo pueda hacer otra persona".
Se va entre reproches: dice que no estaba entrenado para esto y que ha tenido que tragarse algunos sapos. Menciona la difícil relación con Gaspar Llamazares durante meses. También las "descalificaciones gruesas”, ha dicho, de su oponente en las primarias, Carmen Conde. Afirma haber buscado, sin conseguirlo, la unidad con Ángela Vallina y Ovidio Zapico y se ofrece a ayudar a quien le suceda. Lo hace desde la convicción de que Izquierda Unida debe mantener "su vínculo federal" y reconoce que está claro que no habrá confluencia con Podemos en las elecciones autonómicas, pero no la descarta ni en ayuntamientos ni en las Generales.
Ahora, Ramón Arguelles continúa de forma interina durante algún tiempo, probablemente un par de semanas, hasta que la coordinadora colegiada de Izquierda Unida de Asturias elija a un nuevo responsable, que permanecerá un año en el cargo hasta sea convocada una asamblea extraordinaria que elija un nuevo coordinador general.