El alcalde sostiene que la Fundación Gustavo Bueno tiene soporte legal para seguir en el palacete Miñor
López tilda de espectáculo la actitud de Rubén Rosón, y lo desautoriza para actuar en el asunto de la cesión del palacete Miñor a la Fundación Gustavo Bueno
Oviedo
El alcalde de Oviedo, Wenceslao López afirma que la Fundación Gustavo Bueno tiene soporte legal para seguir ocupando el palacete Pedro Miñor, y califica la actitud del concejal de Somos, Rubén Rosón, de "espectáculo", tras sus dos intentos infructuosos de visitar el edificio en el que aseguró tener intención de ubicar un "nido de empresas" .
Wenceslao López ha sido rotundo en sus declaraciones sobre la polémica con la entidad que desde hace dos décadas ocupa el antiguo Sanatorio Miñor, un edificio propiedad del Ayuntamiento de Oviedo. "La situación de la Fundación Gustavo Bueno es legal", ha insistido el regidor.
Para poder afirmar los anterior el mismo alacalde estudió el expediente tras las primeras declaraciones del concejal de Economía, Rubén Rosón, en las que aseguraba que los miembros de la Fundación estaban de manera ilegal, practicamente de ocupas en la que ha sido su sede en las últimas dos décadas, al no haberse firmado el convenio redactado para regularizar la cesión por 50 años, nada más y nada menos, del edificio de titularidad municipal. Pero además Wenceslao López realizó la preceptiva consulta a los servicios jurídicos, que determinaron que "hay 20 años de hechos documentados que dan derecho a la entidad privada a seguir siendo los inquilinos del palacete Pedro Miñor".
El comienzo y el final de esa base legal que sustenta el derecho de la Fundación a utilizar como su sede el total del palacete situado en la Avenida de Galicia, es un acuerdo plenario que en su punto dos recoge "la cesión del Sanatorio Miñor por 50 años a la Fundación Gustavo Bueno", "así tal cual", ha dicho el alcalde. Dicho acuerdo, es verdad que debía ratificarse con un convenio a los cinco años, convenio que nunca llegó a firmarse. Aun así, según ha explicado el regidor, sí hubo otro convenio y subvenciones para la realización de actividades por parte de la entidad hasta la llegada del tripartito de gobierno, que decidió no prorrogarlo.
"Todo esto (lo anterior) lo sabe Rosón", ha dicho Wenceslao López, que ha calificado la actitud del concejal de Somos de "espectáculo", entre otras cosas porque el patrimonio municipal no es de su competencia: "El alcalde, que soy yo, no le ha delegado a Rubén Rosón capacidad de actuación en el patrimonio municipal. En consecuencia, aunque hubiese razones legales, que no las hay, tampoco podría él actuar. Él ha tomado por su cuenta y riesgo esas actuaciones, cada uno es responsables de sus actos, y el recorrido todo el mundo sabe cuál puede ser. Es simplimente un espectáculo y yo creo que no es bueno".
La única forma de revertir la situación del palacete Miñor, sería otro acuerdo plenario para revocar la cesión.
El alcalde ha recordado que "hay más de 25.000 metros cuadrados en locales municipales cedidos en tiempos del PP con cierto descontrol y la concejalía de patrimonio ya ha elaborado además de un inventario un reglamento pendiente de aprobar para normalizar la situación de todas esas instalaciones".