La Marina Alta primera parada del Low Battery Man
Un vecino de la Canal de Navarres emprende un camino solidario, de apoyo y para la divulgación de la encefalomielitis miálgica por toda la Península Ibérica
Parcent
La Marina Alta ha sido la primera parada de un vecino de la Canal de Navarrés, Servando Castelló, que se ha autodenominado Low Battery Man, y que está dispuesto a dar a conocer la encéfalomielitis miálgica y recaudar fondos que ayuden a investigar sobre esta enfermedad, que tan solo en la Comunitat Valenciana padecen unas 12 mil personas.
Un viaje por toda la Península Ibérica, España y Portugal, visitando a personas que igual que él sufren esta dolencia, recabando así testimonios que al mismo tiempo puedan ayudar a otras personas que padecen esta dolencia. Ayer lunes, 25 de marzo, por la mañana partió desde Valencia, y por la tarde se entrevistó en Parcent con otro paciente de esta enfermedad crónica. Vicent Berenguer.
Una compleja enfermedad neurológica y multisistémica, conocida también como sindrome de fatiga crónica, que inhabilitada a los que la padecen a realizar las actividades más frecuentes y que puede agravarse después de cualquier esfuerzo físico o mental.
Ilusionado, positivo y con un mensaje de esperanza, Servando se propone recorrer un total de 60 provincias en menos de un mes. Y lo va a hacer conduciendo una furgoneta, a la que ha bautizado Hope - esperanza en inglés-. Una iniciativa a la que se le ha asociado un gesto: la mano que cubre la mitad del rostro. Porque según explica, pretende hacer "visibles a los invisibles".
Servando ha creado la web www.lowbatteryman.com, y cuentas en Instagram y Facebook, donde tien previsto ir relatando su experiencia en este trayecto vital, solidario y divulgativo. A través de estos canales también será posible contactar con él y solidarizarse con esta buena causa.
Un reto que acaba de comenzar, pero que ya está consiguiendo muy buena repercusión. De hecho su iniciativa ha llegado a diversos puntos del planeta, donde enfermos de encéfalomielitis miálgica le han alentado en este desafío, especialmente duro para una persona que padece esta enfermedad neurológica.
Esta es una enfermedad que no tiene cura, se desconoce que la provoca, e incluso hay gente que la padece y que no ha sido diagnosticada. Disponer de financiación que ayude a saber más sobre esta dolencia, que consiga dar con un biomarcador, que permita dotar de mayor calidad de vida a los que la sufren, y que los enfermos sean reconocidos como tales… forman parte de este gran reto.
Amanda Ortolà
Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad CEU San Pablo. Valencia. Se incorporó al...