Bon Àrea comienza en abril las obras de su nueva planta de Épila
La inversión total prevista por Guissona en la urbanización de su parcela es de más de 148 millones de euros.
El Gobierno de Aragón ha aprobado el Plan de Interés General Autonómico
Zaragoza
El próximo mes comenzarán las obras del complejo alimentario que el grupo Guissona va a construir en Épila, en la provincia de Zaragoza. "Aprobamos 20 millones de euros para la explanación de los terrenos, y esto se inicia en el mes de abril y hay 10 meses de plazo y, a partir de ahí, empezaremos a construir dos o tres naves", ha explicado este marte Jaume Alsina, el presidente y fundador de Guissona. Ya tienen la redacción definitiva del proyecto. En 2021 empezará a funcionar el complejo de Bon Àrea, aunque no estará a pleno rendimiento hasta dentro de 10 años.
El Gobierno de Aragón ha aprobado el Plan de Interés General Autonómico (PIGA), cuyo objetivo es ordenar urbanÍsticamente las 242 hectáreas en las que se ubicará Bonarea. El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, ha querido explicar, con datos comparativos, lo que supone este proyecto. Por ejemplo, "el consumo de agua que va a requerir va a ser el equivalente a la ciudad de Calatayud" y "la necesidad de saneamiento y depuración va a ser equivalente a la ciudad de Teruel, y la demanda eléctrica va a ser equivalente a la de General Motors cuando la planta esté en pleno funcionamiento".
Las obras de urbanización se licitarán en 5 meses, y el plazo de ejecución de la urbanización de los suelos será de dos años. El pleno redimiento de Bonarea en Epila se producirá cerca del año 2030. La previsión es que en ese momento alcance los 3.800 empleos directos. De momento, Jaume Alsina dice el primer objetivo será construir la nave logística, pero no el único: también la fábrica de alimentos para mascotas y el matadero de aves.
El presidente del grupo Guissona, Jaume Alsina, ha afirmado que la creación de empleo es importante, pero no es el único objetivo. "Hemos conseguido mantener las familias en los pequeños pueblos, que siguen vivos porque hay agricultura, hay ganadería y hay ingresos".